El precio del megavatio hora es el termómetro del porvenir de la gran industria: cuanto más descienda el precio de la energía, las multinacionales más podrán elevarse. El envés de la moneda es terrible: si sube el precio de la electricidad, el porvenir se atenaza. Y así está, desde julio pasado la empresa Alu Ibérica (la antigua Alcoa). Pero ahora "parece" que se atisba una esperanza débil al final del túnel: el precio de la luz ha bajado un 21,4 por ciento del año pasado al presente. "Pero tiene que bajar mucho más", subrayó José Manuel Gómez de la Uz, el presidente del comité de empresa de Alu Ibérica Avilés, uno de los negociadores de la salvación actual de la aluminera de San Balandrán.
Esta circunstancia tiene tres explicaciones: la bajada del precio del gas y del petróleo (marcan el precio de la energía), la reaparición de las energías de origen hidráulico y eólico y, por último, la baja demanda presente. Alu Ibérica había manifestado en varias ocasiones su voluntad de poner en marcha las cubas electrolíticas -donde se fabrica el aluminio primario- en el momento en que el precio de la energía fuera competitivo. El miedo que tiene la plantilla de esta gran industria es que este descenso del precio "solo sea un espejismo", que arranque la producción "y que nos metamos en la locura de los precios del año pasado", apostilló De la Uz.
Esta situación actual es la que sustenta el estatuto de la industria electrointensiva, la nueva herramienta de rebaja del precio de la energía tras haberse demostrado la inoperatividad de las subastas de interrumpibilidad. El estatuto, tal cual está ahora -en tramitación-, solo ha cosechado el rechazo de todo tanto de las compañías como de los trabajadores. "El precio ideal del megavatio hora tendría que ser por debajo de 40 euros. Diría más: por debajo de 35. Porque los impuestos adscritos a la energía no han bajado. Suponen 12 o 13 euros añadidos".
Saint-Gobain
Por otro lado, Saint-Gobain Cristalería regulará dos tercios del personal del horno de la planta de La Maruca (pasará de un centenar a alrededor de tres decenas). Esto sucederá a partir del 1 de abril. El horno seguirá produciendo, pero casco (vidrio para reciclar).
