La Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), más conocida como el "banco malo" e impulsada durante el "crack" hipotecario de 2007, es una de las mayores propietarias de suelo de la comarca avilesina: avenida la Constitución, Jardín de Cantos, González Abarca, Los Balagares (Corvera)... Con el respaldo de la inmobiliaria creada por la misma entidad - Árqura Homes-, la Sareb prevé sacar adelante en Avilés casi mil viviendas de las 17.000 que tiene proyectadas por todo el país hasta 2027. Aseguran que cualquier posible cambio en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), idea que ronda al equipo de gobierno avilesino, a la Sareb no le afecta: "Tenemos el perímetro que tenemos, no vamos a ganar más", aclaró una portavoz de la entidad.
La primera promoción de Árqura Homes que previsiblemente vera la luz será la llamada "Aralis Avilés", a la altura del número 36 de la avenida de Alemania: los 63 pisos de entre 1 y 4 dormitorios comenzaron a comercializarse este mes. La obra, sin embargo, no comenzará a ejecutarse hasta el año que viene y la entrega de llaves, de cumplirse escrupulosamente el calendario, no será efectiva hasta 2023. Se trata de viviendas libres: "Vendemos a precio de mercado, ni por encima ni por debajo. Sabemos que los constructores nos acusan de competencia desleal, pero no es cierto: no somos competencia de nadie, no estamos aquí para ganar dinero sino para generar liquidez".
Los pisos de la avenida de Alemania se levantarán en unos solares del fallido convenio de la avenida de la Constitución, donde se construyó solo uno de los tres bloques de viviendas previstos, una primera fase de 40 pisos. Los precios por vivienda nueva oscilan aproximadamente entre los 102.000 euros de un piso de sesenta metros cuadrados y una habitación y los 292.000 de un inmueble de 136 metros cuadrados y tres habitaciones. Todos se anuncian con plaza de garaje, terraza y trastero.
La previsión de la firma inmobiliaria de la Sareb pasa por invertir en los próximos años 2.200 millones de euros en el desarrollo de proyectos residenciales en todo el país, de lo que una parte de quedará en Avilés donde tienen otros proyectos en camino.
También se están produciendo movimientos en los planes para hacer pisos en Ciudad Jardín y en los terrenos del antiguo "San Fernando". El "banco malo" presentó hace unos meses el proyecto de reparcelación y urbanización para el entorno de Ciudad Jardín y Jardín de Cantos. El ámbito de actuación del primero abarca 74.409 metros cuadrados, de los que se aprovecharán 35.107 metros cuadrados, el equivalente a 351 viviendas. El gobierno avilesino (PSOE) tiene especial interés en impulsar esta zona residencial, para poder poner en el mercado viviendas más asequibles que las del centro en la zona del municipio más próxima a Castrillón, junto a Raíces. Podrían servir para extender el plan que ya tienen en marcha para las casas de los maestros de Versalles y La Luz: pisos para jóvenes, con el fin de asentar población en el municipio. Desde la Sareb confirman que en Asturias sí construirán -en el total de promociones proyectadas en la región- viviendas sociales, aunque por el momento no definen la ubicación.
La Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria está detrás también del impulso de una zona residencial de 16.015 metros cuadrados en La Rocica, entre El Pozón y Villalegre. Los terrenos lindan con la línea de ferrocarril de San Juan de Nieva a Villabona, con las traseras de las viviendas de la calle Santa Apolonia y con la calle San José Maribona. Los terrenos en cuestión son pasto ahora de la maleza y el matorral y en ellos se proyecta edificar cuatro inmuebles con fines residenciales, tres privados de tres alturas y ático y un cuarto público con dos alturas.
El plan incluye la habilitación de 41 plazas de aparcamiento en la vía pública y dos nuevos viales, uno paralelo a la vía de ferrocarril y un segundo que comunicará esa zona con la calle Santa Apolonia. El proyecto contempla igualmente la ampliación de la calle Maribona y una zona verde de 1.836 metros cuadrados. Los promotores pretenden dar continuidad al barrio de Villalegre y quieren habilitar nuevas zonas verdes e incorporar terrenos para equipamientos. La estructura urbanística es como sigue: 7.161 metros cuadrados para uso residencial, 5.281 para viales, 1.620 para equipamientos y dotaciones y 1.836 para espacios libres.
