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El vecindario de Los Amanteles urge el desalojo y derribo de una casa ocupada

Los residentes dicen vivir atemorizados por los inquilinos ilegales del inmueble, que han llegado a apedrear a quienes recriminan su actitud

El vecindario de Los Amanteles urge el desalojo y derribo de una casa ocupada

La pesadilla se repite en Los Amanteles, un paraje al sur de Avilés que desde hace años está "abandonado a su suerte", en opinión de los allí residentes, gente de avanzada edad en su mayoría. El mal sueño tiene como protagonistas a los ocupantes ilegales de una casa abandonada, la que se levanta en el número 28 de la calle. En los últimos años fue denunciada la ocupación de dicha vivienda en varias ocasiones "llevando parejo siempre ese hecho el incremento de robos y conflictos en la zona", según el relato vecinal. Para desesperación del vecindario, esa casa ha vuelto a ser ocupada. Sus nuevos "inquilinos", según explica un portavoz de los residentes, "son un grupo de menores que están sembrando el terror entre los vecinos. Recientemente, una persona de avanzada edad que vive en los alrededores fue atacado con el lanzamiento de piedras y palos cuando llamaba la atención a la pandilla para que dejasen de tirar piedras al ganado que pasta en los prados cercanos".

La ocupación de la casa en cuestión -y las molestias asociadas- es solo la punta de iceberg. Los vecinos de Los Amanteles llevan una década lamentando el "abandono total y absoluto" que sufren por parte de la administración local. Las protestas son variadas: la existencia de un vertedero ilegal, con aportes de materiales que en su mayor parte son desechos de construcción y entre los que se encuentran planchas de fibrocemento fabricadas con amianto, un material cancerígeno; el incendio, hace tres años, de ese vertedero, un fuego que afectó a los cierres vegetales que cierran las fincas colindantes; el intento de retirada de los únicos contenedores de basura de la calle o la escasa frecuencia del autobús en la zona, entre otras quejas.

Por antiguas, esas reclamaciones se llevan con paciencia; pero lo que ha colmado la paciencia es la vuelta a las andadas de los "okupas". "Esta semana fue hallado en la casa abandonada un perro que sus dueños habían dado como desaparecido y que pudieron recuperar cuando la Policía Local comprobó el chip. Día tras día, esa pandilla va llevando a la casa mobiliario -sofás, sillas...- haciendo aún más suyo ese espacio, en el que se reúnen más de una decena de chavales sin atender a las medidas de protección decretadas por el coronavirus, ni en cuanto al número ni en cuanto al uso de mascarillas", detalla el portavoz vecinal.

Por todo lo anterior, los vecinos piden la adopción de las siguientes medidas: el desalojo de los ocupantes de la casa abandonada y una "intervención social" con los mismos, el vaciado de todos los enseres allí acumulados, el derribo del edificio y su desescombro para evitar que suceda como con otra vivienda demolida hace años, cuyos restos, al no ser retirados, se convirtieron en un "vertedero pirata".

En otro orden de cosas, el vecindario de Los Amanteles urge el mantenimiento de la zona -"los desbroces efectuados recientemente no llegaron a toda la calle y el último realizado ha sido bastante deficitario", asegura un residente- y la reposición de la línea 18 del autobús urbano, que al ser anulada a raíz de la pandemia dejó sin transporte a los vecinos de esta zona.

Los Amanteles es una vía que utilizan residentes en el centro para desplazarse a la zona sur de Avilés y viceversa. Pero los vecinos, al igual que los del Vidriero y zonas colindantes se sienten "ciudadanos de segunda" y reprochan al gobierno local que "casi no ha destinado un solo euro a la zona, a diferencia de otros puntos del concejo que reciben cada año fuertes aportaciones del presupuesto municipal".

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