Mónica Lozano García (Avilés, 1975) trabaja desde 2019 como vicepresidenta de la Liga Reumatológica Asturiana (LAR) si bien lleva ya años vinculada a la asociación. Madre de dos hijos adolescentes, Lozano es Técnico Especialista en Informática de Gestión. Ahora avanza la programación de la Liga para este próximo curso que se avecina atípico por la crisis sanitaria.
- Han retomado su programa terapéutico tras meses de parón por el covid-19. ¿Qué ofrecen?
-Ofrecemos actividades dirigidas a mejorar la calidad de vida de las personas afectadas por enfermedades reumáticas, tanto en el ámbito físico como en el psicológico. Sabemos que la situación sanitaria aún es crítica, pero las consecuencias de la no movilidad para estas patologías son muy graves, por lo que hemos considerado no posponer más la puesta en marcha de nuestras actividades terapéuticas manteniendo todas las medidas de seguridad que nos marquen.
- Las clases de taichí se desarrollarán en el parque de Ferrera, una importante novedad.
-Las clases de taichí adaptado que nuestra asociación lleva a cabo han sido un éxito de participación desde que se pusieron en marcha en el 2018. Sin embargo, muchas personas se sienten reacias a participar en actividades en espacios cerrados, por lo que nos pareció una alternativa interesante impartir esta actividad en un espacio como el Ferrera, que favorece la relajación y la sensación de bienestar.
- Ejercicio físico adaptado, baile y también psicología completan la agenda de la Liga para este curso.
-Los beneficios del ejercicio físico y del baile, ambas actividades adaptadas a las personas que padecen estas enfermedades, son evidentes: evitar la incapacidad motora de las articulaciones y reducir el dolor. En cuanto a la terapia psicológica es fundamental para ayudar a afrontar los efectos de la cronificación que se da en estas patologías, logrando disminuir las tensiones, el estrés y la ansiedad generados por el dolor que sufren diariamente los enfermos reumáticos.
- ¿Cuántos socios tienen?
-En Asturias contamos con 2.525 socios entre personas afectadas, familiares y colaboradores. De éstos, 850 pertenecen a Avilés, y el resto se distribuyen entre las demás delegaciones de la asociación: Gijón, Oviedo, Langreo, Mieres y Llanes. También contamos con socios del Occidente e incluso de fuera de Asturias.
- ¿Cuál es el perfil del enfermo reumático que acude a la Liga?
-El 70% de los socios son personas de entre 60 y 85 años, principalmente mujeres, interesadas en las actividades terapéuticas, para prevenir y/o rehabilitar dolencias propias de la edad. El resto son mayores de 22 años, principalmente entre 35 y 45, que precisan asesoramiento y orientación social, legal y laboral.
- ¿Ha empeorado el estado de salud del enfermo reumático en estos últimos meses?
-Por supuesto, la falta de movilidad en estas enfermedades genera dolor, y el dolor, conlleva situaciones de ansiedad, estrés y depresión. A pesar de que durante esos meses ofrecimos clases on-line tanto de ejercicio físico, como de taichí, muchas personas no pudieron acceder a ellas por no contar con los conocimientos o con los medios técnicos necesarios para conectarse a estas clases.
- ¿Cuál es el reto de la Liga a corto plazo?
-Podemos ofrecer el cien por ciento de las actividades grupales.
- ¿Y a largo plazo?
-Conseguir mayor visibilidad y reconocimiento para estas enfermedades a nivel social, legal y asistencial.
