Eran las 4.25 de madrugada cuando una empleada de la gasolinera de Cristalería, en la avenida de Lugo, sintió un fuerte golpe. Supuestamente unos ladrones intentaron acceder al local mediante un "alunizaje"; es decir, empotrando un vehículo a velocidad contra la puerta principal, en este caso. La gasolinera a esas horas estaba cerrada al público, pero dos trabajadores estaban ya preparando los primeros pinchos de la mañana. "No se llevaron nada, se marcharon. Nosotros dimos aviso a la policía", explicaba la joven a mediodía.
El "alunizaje" es un robo que se comete contra comercios. La técnica habitual consiste en esperar a que el comercio esté cerrado y vacío. En ese momento se utiliza un automóvil que se lanza directamente contra la puerta y el escaparate del comercio (contra la luna de cristal, y de ahí el nombre de "alunizaje"). En los últimos meses, distintos establecimientos comerciales de la región y también muchas gasolineras fueron objeto de los cacos por este método. La mayoría de los casos de entonces estaban relacionados con la llamada banda del Seat León, ya desarticulada.
La Policía Local, en otro orden de cosas, detuvo a la 1.30 de ayer a un avilesino s de 39 años por un presunto delito contra la seguridad vial, tras verse implicado en un accidente de circulación en la intersección de la calle Marqués de Suances con la plaza de los Oficios. Dio positivo en alcoholemia.
