Los jabalíes se han convertido en un vecino más de Avilés. La noche pasada pudo verse a una piara de suidos campando a sus anchas en torno a una de las áreas empresariales emblemáticas de la ciudad, el PEPA (Parque Empresarial Principado de Asturias). Los seis ejemplares que desfilaban por el vial más próximo al puente Azud no hicieron caso ni de las ráfagas ni del sonido del claxon de varios automóviles tratando de advertirles para despejar la calzada.

"¡Vaya filetes salen de ahí!", es la exclamación que lanzan dos de los sorprendidos pasajeros de un coche, que contemplaban la escena mientras grababan el paseo nocturno de los jabalíes por Avilés. Los animales cambian de carril -llegan incluso a rebasar la línea continua de la carretera-, e ignoran a los vehículos con los que se cruzan.

"¿No vino la Policía, o qué?", se preguntan otros conductores mientras contemplan la escena desde el sentido contrario de circulación. "¿A dónde vais, zumbaos?", les gritan otros, por la ventanilla, mientras los jabalíes continúan en su paseo a marcha ligera por el PEPA.

Los jabalíes, la noche pasada cerca del puente Azud Lne

En los últimos tiempos no es extraña la presencia de los suidos en otros puntos de la comarca, cada vez más próximos a las áreas urbanas más pobladas. La última ocasión, el pasado junio, en Salinas, en Castrillón, donde los jabalíes volvieron se exhibieron por aceras y parques; socializando con todo lo que encuentran a su paso. Y, en aquella ocasión, llegaron a acercarse incluso hasta la playa. A escasos metros del mar, en la plaza del Náutico de la localidad castrillonense, se pudo ver a un suido merodear por los jardines en la tarde noche.

Anteriormente fueron vistos otros ejemplares en un parque local sin que hicieran ademán de molestia alguna por la presencia de algún curioso grabando la escena con su teléfono móvil como ha ocurrido también ahora. Y llegaron incluso a merendar con unos niños en un parque de Raíces. Otro ejemplo de la nueva normalidad también para los suidos.