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Defensa retoma la subasta de la vieja sede de la Capitanía Marítima

El trámite llega al quinto intento del Ministerio por deshacerse del inmueble, que sale a la venta este año por unos 300.000 euros

La vieja sede de la Capitanía Marítima volverá a salir a subasta. El Ministerio de Defensa planea intentar una nueva venta –la quinta desde 2017– del edificio, ubicado en la avenida de Conde de Guadalhorce. Por el momento se desconoce el precio de salida que se le pondrá al inmueble; si bien, fuentes ministeriales afirman que la tasación no diferirá mucho de la anterior, que fue de 270.220 euros. Los planes de Defensa pasan por hacer pública la subasta después de Semana Santa.

El órgano ministerial puso el cartel de “se vende” a la vieja sede de la Capitanía Marítima en 2008, cuando fue incluido en un registro nacional de terrenos militares disponibles para su enajenación. Si bien, no fue hasta 2017 cuando trató de vender el edificio por la vía de la subasta. Por aquel entonces, al edificio se le puso un primer precio de 370.672 euros. No hubo ofertas. Se volvió a intentar con una segunda subasta de 333.605, que tampoco encontró comprador.

En 2019 Defensa volvió a la carga. Por aquel entonces el precio de la primera subasta fue de 300.244 euros. La segunda de 270.220 euros. Ambas quedaron nuevamente desiertas. Desde entonces, el edificio ha figurado en el listado de edificios en venta del Instituto de Vivienda, Infraestructura y Equipamiento de la Defensa por 270.220 euros, que tampoco recibió ofertas para su compra.

La vieja sede de la Capitanía Marítima lleva en desuso desde 2004, cuando se trasladó a la travesía de la Industria, justo al lado de la sede de la Autoridad Portuaria de Avilés. Se trata de una propiedad de más de 1.600 metros cuadrados ubicada en la avenida Conde Guadalhorce. El edificio se encuentra bastante deteriorado, tanto en su exterior como en el interior, donde a lo largo de las últimas dos décadas ha sufrido varios actos de saqueo y vandalismo.

Desde su abandono, se propusieron diversos usos para el edificio. Se barajó la posibilidad de asentar allí un centro de empresas impulsado por la Cámara de Comercio, pero la operación resultó inviable. También se planteó la opción de trasladar allí la jefatura de la Policía Local, una alternativa hoy desechada, pues el Ayuntamiento estudia habilitar unas instalaciones para el cuerpo municipal en La Grandiella.

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