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La obra del saneamiento de Bañugues comenzará a lo largo del próximo verano

En función de las alegaciones que se presenten durante la fase de información pública, la licitación podría completarse antes de fin de año

La playa de Bañugues.

Los trabajos para poner fin a los vertidos fecales en la playa de Bañugues no serán visibles, hasta el verano próximo. Al menos esta es la previsión que barajan los responsables del contrato

Esta misma semana salió a información pública el proyecto, a efectos de que todos los vecinos conozcan los detalles del mismo, así como las expropiaciones a realizar, para luego iniciar el procedimiento previo a la licitación de las obras. En función de las alegaciones que se presenten durante el período de información pública, la obra podría licitarse a finales de año o principios de 2022. En cualquier caso, precisan las fuentes consultadas, las obras no podrán empezar, en el mejor de los casos, hasta dentro de un año.

Durante su visita la pasada semana al concejo, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Cantábrico, Manuel Gutiérrez, señaló que las actuaciones están calificadas de interés general del Estado e incluidas en los Fondos de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España. Se construirán en el marco de este contrato tres estaciones de bombeo en Moniello, La Corona y Luanco y una estación de bombeo con tanque de tormentas en Bañugues.

También se colocarán más de 17.000 metros de colectores que funcionarán por gravedad y más de 5.000 metros de tubería de impulsión. Para ello se pretenden expropiar 343 parcelas, que se han valorado en 281.622,65 euros.

Las obras tienen un plazo estimado de ejecución de 18 meses e implica, una inversión de 6,33 millones de euros, la mayor inversión pública en el municipio de la época reciente.

La red de saneamiento proyectada dará servicio a la zona costera situada al este del cabo Peñas, lo cual debe repercutir positivamente en la calidad ambiental de las playas de Bañugues y Moniello. Además, incluye la recogida de las aguas residuales de núcleos interiores como Heres, Gelad, Cabañas, Banzoleo, Fombona, Balbín, Peroño y parte de Nembro. Todos los vertidos, junto con los procedentes de Luanco, serán tratados en la depuradora de Maqua, ubicada ya en terrenos pertenecientes al municipio de Avilés.

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