El coste del servicio de comedor en las tres escuelinas de Avilés para el nuevo curso ronda los 160.000 euros, impuestos incluidos. El Ayuntamiento sacó ayer a licitación el contrato, que está reservado a centros especiales de empleo o empresas de inserción. El plazo de presentación de ofertas concluye el 9 de septiembre, día de comienzo de las clases en Primaria. Las tres escuelinas de titularidad municipal del primer ciclo de Educación Infantil son las de La Toba, La Magdalena y El Quirinal, que según las previsiones municipales tendrán este nuevo curso 62, 36 y 93 alumnos, respectivamente.

El pliego de condiciones establece que el contrato se prestará desde el primer día del curso escolar (o al día siguiente de la formalización en documento administrativo) hasta el 31 de julio de 2022, a excepción de los fines de semana y festivos. El servicio incluye el diseño de dietas nutricionalmente equilibradas, programación de menús y la compra, suministro y distribución de los alimentos; la elaboración de comidas en las propias escuelinas, tanto para el alumnado como para el personal docente; el mantenimiento y limpieza de la cocina así como la organización del servicio, de modo que favorezca la educación y formación en valores.

El adjudicatario elaborará cada trimestre, al menos, un menú diferente y saludable de cinco de semanas. Tiene que estar diseñado por personal con formación acreditada en nutrición y dietética. Cualquier modificación en los menús se tiene que comunicar a la dirección del centro con un mínimo de siete días de antelación. Los menús tienen que ser equilibrados, variados y adaptados a la edad siguiendo las recomendaciones de la guía “Comer en la escuela infantil”, editada por las Consejerías de Sanidad y Educación.

En cuanto a la calidad de las materias primas, solo se podrá utilizar aceite de oliva virgen o virgen extra, la sal no se utilizará en los menús de los menores de 12 meses y las legumbres, verduras y hortalizas, pescados, carnes y huevos y la fruta serán “de primera calidad”.