Melchor, Gaspar y Baltasar son hombres previsores, una virtud tal vez asociada a la edad o a la experiencia. Por esta razón ya planean cómo será su regreso a Avilés, que el año pasado, y debido a la emergencia sanitaria, les recibió con una gran gala en el pabellón de exposiciones de La Magdalena, pero sin la tradicional cabalgata por las calles más céntricas de la ciudad ni la ya clásica bienvenida en el puerto deportivo. Este año, con las cifras de la pandemia contenidas, todo apunta a que el 5 de enero por la tarde se celebrará el pasacalles al que nos tienen acostumbrados Sus Majestades de Oriente, según ha podido saber este diario de fuentes próximas a la comitiva real.
Prueba también de los avances en la programación es que el gobierno local ha contratado con la empresa “El bazar de las fiestas” el alquiler de los trajes para la cabalgata de los Reyes Magos por 17.501 euros. Con Melchor, Gaspar y Baltasar y sus ayudantes en Avilés regresará, pues, a las calles de la ciudad la ilusión, sobre todo de los más pequeños. En la pasada Navidad, en la gala de bienvenida a los monarcas de Oriente, únicamente pudieron participar 300 personas en cada uno de los tres turnos de acuerdo a las normas dictadas entonces por los responsables sanitarios. Esto significa que muchos niños se quedaron sin ver de cerca a los Reyes Magos en la víspera de la noche más mágica del año para los más menudos de las casas.
Los comercios y la hostelería de Avilés colaboran, entre tanto, para la iluminación de la ciudad para la próximas fiestas. La previsión de la Unión de comerciantes (Ucayc) es que más de 400.000 bombillas led (bajo consumo) alumbren las calles y plazas, a lo que se sumará la instalación, en la plaza de España, de un enorme y luminoso abeto de 22 metros de alto y 10 de base, rematado por una estrella, y bajo el que se podrá transitar, según avanzó este diario.
