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Los hoteles prevén un "duro invierno" tras un verano de ocupación récord

Las actividades culturales y deportivas salvan septiembre y octubre, pero se prevé un retraimiento del consumo por la incertidumbre económica

Turistas en el centro de Avilés, con el Ayuntamiento al fondo. | Mara Villamuza

La incertidumbre económica retrae el consumo y los hoteles ya se preparan para un invierno que prevén "duro", tras un verano de ingresos récord, aunque empañado por la elevada inflación y los costes energéticos. Los eventos deportivos y culturales programados para septiembre y octubre permitirán salvar las cuentas en otoño. O en eso confían.

Las previsiones que manejan las direcciones de hoteles en Avilés son coincidentes. María José Arias, directora de 40 Nudos, explicó que "la ocupación para septiembre y octubre se prevé buena por las actividades culturales y deportivas que están programadas en la ciudad: cómic, tenis, judo... Noviembre y diciembre se presentan muy flojos, pero todavía es muy pronto, lo habitual es que nos lleguen las reservas a última hora. Pero va a ser un invierno duro. La crisis que se anuncia retraerá el consumo después de un verano fantástico, con estancias más largas que en años anteriores, muchas familias y un llamativo incremento en la ciudad de peregrinos del Camino de Santiago".

Daniel Rodríguez, director de Zen Balagares, señaló que se prevén para los próximos meses unos niveles de ocupación similares a 2019, "mejores que en 2020 y 2021", los años de la pandemia. Pero advirtió de que "el foco toca ponerlo en los costes energéticos, ya que la demanda está bastante normalizada, pero los costes están desorbitados y hay incertidumbre sobre si en otoño e invierno siguen siendo así de altos o incluso mayores y se retrae el consumo".

La directora de OCA Villa de Avilés, Aida Iglesias, afirmó que "en septiembre sigue habiendo algún cliente que viaja por ocio, de vacaciones, y peregrinos del Camino de Santiago, pero en otoño la gente viaja menos, se vuelve a las rutinas, al colegio y al trabajo y con ello se empieza a reactivar el cliente de empresa. Los fines de semana que hay eventos, como la pasada semana que hubo rally en Pravia y tiro, la ocupación está completa. Con respecto a los festivos de octubre y de noviembre, no permiten realizar puente, así que es pronto para hablar de ocupación en esas fechas".

El hotel Alda Palacio Valdés prevé una ocupación media del 73% para el último cuatrimestre, sustentada básicamente en la celebración de los diferentes eventos culturales programados, como el Fifty-Fifty de jazz y poesía o el Avilés Acción Film Festival, el Salón del Manga de Asturias, varios conciertos que tendrán lugar en los próximos meses y congresos como el UAPFE (Unión de arquitectos peritos y forenses de España) o el Salón de las Energías Renovables, Norte Renovables, entre otros eventos. También se espera recuperar el segmento de negocios. Sí destacaron desde esta cadena hotelera que "el ritmo de reservas es bastante inferior a años precedentes debido, muy probablemente, a las previsiones de inflación a corto plazo, entre otras circunstancias".

Julio Álvarez, director del céntrico hotel Don Pedro, remarcó que "la incertidumbre es total, después de un verano que ha sido estupendo. Para septiembre y octubre hay reservas porque hay actividades culturales, deportivas y contamos con varios clubes que hacen rutas y tienen aquí su punto de descanso. En noviembre y diciembre las reservas son de última hora, pero hay mucha incertidumbre con los continuos avisos de crisis económica".

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