Cuenta atrás para el inicio de las costeras de xarda y bocarte

Los pescadores ven "señales positivas" en aguas al Este de Asturias y estiman que podrán salir a la mar "en pocos días"

Un marinero pertrecha un barco en el puerto de Avilés para salir a faenar en una anterior campaña de bocarte. | M. L.

Un marinero pertrecha un barco en el puerto de Avilés para salir a faenar en una anterior campaña de bocarte. | M. L. / Francisco L. Jiménez

Francisco L. Jiménez

Francisco L. Jiménez

La comezón que todos los años suele producir entre los pescadores el inminente comienzo de la costera de la xarda (caballa) se mezcla este año con el "comecome" que genera la también cercana apertura de la pesquería de bocarte. Los barcos ya están pertrechados para salir a faenar –de hecho, alguno ya ha puesto proa a Francia para probar suerte con la xarda en aguas vascas–, las tripulaciones se hallan dispuestas para embarcar y en las rulas se ha hecho el consiguiente acopio de cajas y demás enseres que demandarán los patrones. Lo que falta es que los bancos de peces se pongan a tiro y, a ser posible, que la meteorología acompañe. En este sentido las previsiones para los próximos días son favorables; después de varias semanas de temporales, parece llegar cierta calma al Cantábrico.

Tras dos meses de languidez pesquera –enero y febrero son meses de transición en los que la flota descansa o centra la faena en muy pocas especies– llega el momento de dar el pistoletazo de salida a dos de las campañas de las que dependerá en buena medida la nota final del año pesquero. De la importancia de las costeras de xarda y bocarte da fe el hecho de que el año pasado las ventas en las rulas asturianas de estas especies generaron un valor de 9,8 millones de euros, el 18 por ciento del total facturado por las lonjas y unas descargas de 6,65 millones de kilos, la tercera parte del volumen global. Y eso considerando que 2023 no fue un buen año en términos generales para las capturas de xarda y bocarte en el Principado; en el primero de los casos, porque escaseó y en el segundo, porque sus capturas se realizaron mayoritariamente en aguas costeras de Cantabria y el País Vasco.

En las últimas horas, las noticias que han llegado a los mentideros pesqueros asturianos, como la rula de Avilés, son halagüeñas. En cuanto a la xarda, se tiene conocimiento de la descarga de 20.000 cajas en el puerto vizcaíno de Ondárroa, una cifra respetable que va más allá de la simple anécdota y que da a entender que la caballa ya está "a la vuelta de la esquina". Este pescado se mueve en estas fechas del año en ruta migratoria de Norte a Sur y de Este a Oeste siguiendo la costa del Arco Atlántico en el sentido de las agujas del reloj; por eso, su avistamiento en aguas de Vizcaya hace pensar a los pescadores asturianos que podría llegar al Oriente de Asturias la próxima semana.

Del bocarte aún hay mejores señales. Barcos arrastreros (que no tienen a esta especie entre sus objetivos) han cogido bocartes sin querer en sus redes faenando en caladeros situados entre Gijón y Llanes. Este hecho da a entender dos cosas: que hay bocarte en la zona y que tiene un tamaño comercialmente interesante. Los pescadores vascos –los "arrantzales" en euskera– han tomado nota del "hallazgo" en aguas asturianas y, decepcionados con el escaso tamaño del bocarte que pescan en su costa, sopesan aventurarse hasta Asturias en la esperanza de empezar a pescar en cantidad y con calidad.

Suscríbete para seguir leyendo