Las parroquias avilesinas han dado este año la primera comunión a más de 250 niños

El calendario de las primeras comuniones se cerró ayer en las principales parroquias de Avilés. En total, más de 250 niños recibieron el sacramento, principalmente, en los templos de San Nicolás de Bari y de Santo Tomás de Cantorbery, en Sabugo. En la jornada de ayer se iniciaron en la eucaristía las últimas tandas de comulgantes, a los que acompañaron como es habitual sus familiares antes de poner la guinda al día con una comida opípara.

La parroquia donde se dio la primera comunión a más niños fue, como suele ocurrir todos los años por su céntrica ubicación, la de San Nicolás de Bari: 115 repartidos en cinco tandas en otros tantos días de mayo. Le sigue la parroquia de Santo Tomás de Cantorbery, con 67 comulgantes. La unidad pastoral La Magdalena-Versalles-San Agustín inició en la eucaristía a 30 niños, la unidad pastoral Villalegre-La Luz hizo lo propio con trece y en la unidad pastoral Llaranes-El Pozón fueron nueve.

En el resto de parroquias avilesinas también hubo primeras comuniones, de modo que la suma total de primeros comulgantes este año supera los 250, por debajo de los 300 que eran los habituales hace un lustro. Y es que también la tradición de la Primera Comunión se reciente, como la red educativa de Primaria, de la caída de la natalidad en la comarca. Lo que no se ve afectado es el carácter festivo del día de la Primera Comunión, una jornada de emociones, regalos, buenos deseos y encuentros familiares.

Como es costumbre en Avilés, los fastos de la Primera Comunión aún no han concluido para aquellos niños y niñas que participen el próximo domingo, 2 de junio, en la misa central de la fiesta avilesina de Corpus Christi, programada a las 12.30 horas en la parroquia de San Nicolás de Bari. Habrá alfombras florales en el atrio del templo y los niños de la Primera Comunión revalidarán el sacramento.

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