Candás,
Braulio FERNÁNDEZ
Las obras de reconstrucción de la fábrica de Ortiz para convertirla en un museo de la pesca y la conserva se encuentran paralizadas, pero ésta no es la primera ocasión en los tres meses en que se desarrollaron que se ven frenadas. Así, a pesar de que la empresa precintó el recinto en el mes de octubre, los trabajos no pudieron dar comienzo de forma inmediata, ya que se había producido el hallazgo de varias piezas de arqueología industrial con valor suficiente para ser rescatadas y posteriormente expuestas en el futuro museo. Se trataba de dos autoclaves y una caldera antigua, con valor histórico al representar el cambio en la forma de producir conservas, mediante su mecanización.
Los empleados de Contratas Iglesias, ganadora del concurso de adjudicación con una oferta que rebajó en más de un 30 por ciento el precio inicial, se vieron obligados a esperar durante varias semanas a que se retirasen esos tres elementos. La caldera, en concreto, necesitaba de una extracción segura del suelo, ya que de lo contrario podría haberse descompuesto, aquejada como estaba por la oxidación.
Ya en el mes de noviembre, una vez eliminado ese problema, parecía que los trabajos podrían comenzar a un ritmo normal, pero una vez analizada la vieja estructura de la fábrica de Ortiz que sobrevivió al derrumbe de enero de 2010 la empresa ha apreciado que el coste de reconstrucción es más elevado a causa de ese incidente.
Los trabajos se han visto detenidos de nuevo sólo unas semanas después, y el plazo previsto para finalizar la obra, inicialmente en los meses de junio o julio de este año, ha sido descartado por completo. Toca de nuevo esperar.
