Candás,

Braulio FERNÁNDEZ

El Carnaval de Candás no se adelantará al sábado 9, como pretendían los hosteleros de la calle Valdés Pumarino. Ésa fue la principal conclusión que dejó la reunión celebrada ayer entre representantes de las peñas marineras de Candás y los empresarios. «Entre las peñas hay división entre quienes prefieren que se siga celebrando el lunes, como toda la vida, y quienes admiten que el cambio al sábado es positivo por ser festivo al día siguiente», admitía al finalizar el encuentro uno de los hosteleros.

El motivo del conflicto es que los bares piden la ampliación del horario el lunes de Carnaval, puesto que de lo contrario tendrían que cerrar, en su mayoría, entre la 01.30 y las 03.30 horas de la madrugada. Sin embargo, desde el Ayuntamiento se aclaró la pasada semana que la ampliación no era posible, tal y como se recoge en la nueva normativa de ruidos del municipio, aprobada a comienzos del pasado verano.

Esta nueva normativa ha causado gran malestar entre los empresarios, si bien no se había hecho palpable hasta ahora, que con la llegada del Carnaval se han hecho visibles sus restricciones. El Ayuntamiento aclaró ayer que ninguno de los empresarios efectuó alegación alguna a la normativa de ruidos durante el período en que estuvo en información pública, como sí hicieron, sin embargo, varios vecinos. Más aún, estas alegaciones no se produjeron a pesar de que, tal y como confirmaron fuentes municipales, se dirigió una carta a la Asociación de Hosteleros de Carreño advirtiendo de la apertura del período de alegaciones a la norma.

El escenario se presenta ahora complejo para los bares, que de no variar la situación han amenazado con el cierre de sus negocios el próximo lunes, a las diez de la noche. Hoy mismo está prevista una nueva reunión entre los empresarios en su empeño de encontrar una salida buena para todas las partes, y una vez conocida la opinión de las peñas marineras, que no ha servido para aclarar la situación. Fuentes de la hostelería señalaron ayer, no obstante, que no se descarta la opción del ampliar el horario el lunes y para ello se busca un resquicio legal en la normativa de ruidos.