"El Prendes sigue siendo el cine de antes, pero con la calidad del siglo XXI". Así lo cree Alain Fernández, gerente del teatro de Candás, una institución que el pasado 1 de enero cumplió 60 años de historia. La junta rectora del patronato acaba de aprobar las cuentas para este año: 240.043 euros. Fernández destaca que, por primera vez, el concejo apuesta de igual forma por el cine que por el teatro. "Antes la partida para programación cinematográficas era más elevada que la de contratación de grupos musicales y compañías de teatrales. Ahora se han igualado", explica.
Entre sus objetivos figuran la organización de ciclos con películas de contenido social, así como la apertura del Prendes a todos los públicos, sobre todo, a las personas con discapacidad física y sensorial. Para ello, el teatro trabajará con el Centro de Atención a la Dependencia, que el FASAD tiene en Candás. Además, el presupuesto de 2016 incluye una aportación extraordinaria de 16.200 euros para hacer obras en materia de accesibilidad.
Alain Fernández cita también como novedad la colaboración con los hosteleros de Carreño a través de la patronal del sector, OTEA. "Los últimos viernes de cada mes habrá una función de teatro a la par que los restaurantes de la villa preparan menús especiales para las cenas. El objetivo es potenciar la cultura y el turismo en Carreño", precisa.
El Teatro Prendes afrontó el año pasado una de sus obras más importantes: la digitalización de las proyecciones ante la desaparición del formato Celulio de 35 mm. En ello se invirtieron 46.000 euros, que fueron financiados a través de los fondos Leader como proyecto de carácter no productivo.
Alain Fernández afirma que la transformación ha sido buena y ha permitido ofrecer al público películas actuales y de calidad. Pese a esa modernización, el Prendes no pierde su esencia. "Queremos seguir siendo el cine de siempre, el cercano, el que ofrece una oferta de ocio distinta", agrega.
La programación estival es uno de los platos fuertes del Teatro Prendes. En este sentido, Fernández quiere potenciar dos actividades: el Salón de Teatro Costumbrista, que es "nuestra joya de la corona", y el Festival Internacional de Títeres, que cada vez atrae a más público a la villa candasina.
