El Casino de Candás está en una situación delicada desde hace meses y tiene serias dificultades para afrontar el recibo de la contribución de sus locales, pero recibirá finalmente la ayuda municipal. El Ayuntamiento echará una mano al colectivo y aportará fondos para su salvación.
"Vamos a colaborar con el Casino porque es una institución de mucha importancia en el concejo, igual que antes lo hicimos con otras entidades como el Candás de fútbol", expresa la alcaldesa, la socialista Amelia Fernández, que no concreta la cifra que aportará el Ayuntamiento porque asegura que primero ha de analizar ciertas variables. La más importante, la disponibilidad presupuestaria municipal, que se concretará en los próximos días.
La sociedad del Casino sufre ahora las consecuencias de una denuncia anónima del pasado mes de febrero que ha derivado en que la asociación esté ahogada económicamente a sus setenta años de historia. La razón que explica esta situación se explica por un incumplimiento de la ley del juego al organizar un bingo con dinero de por medio. Un porcentaje del capital que obtenían con ese juego ayudaba a costear parte del presupuesto de la entidad. Ahora el problema está en la fórmula para abonar el recibo del IBI por los locales de la asociación. Según los socios de este colectivo de 160 miembros, el importe a pagar por sus propiedades ronda los 3.000 euros.
Las cuotas anuales del grupo no cubren los gastos, de ahí que los socios idearan hace meses la puesta en marcha de un nuevo método de financiación, es decir, establecer una derrama de quince euros por miembro.
El desarrollo de actividades lúdicas y deportivas también ayuda a costear el precio del IBI de los locales, pero la cantidad recaudada sigue sin ser suficiente para hacer frente al impuesto. De ahí que el Ayuntamiento de Carreño, tras varias reuniones con la junta directiva, haya acordado llegar a un acuerdo para salvar el centro donde muchos candasinos juegan, se reúnen y socializan desde hace setenta años.