Los vecinos de un bloque de pisos de la calle Asturias de Pola de Siero tuvieron ayer un violento despertar con motivo de un incendio iniciado en el portal del edificio de madrugada, que obligó a movilizar a efectivos de bomberos, una ambulancia y la Policía Local, aunque finalmente no hubo que lamentar daños personales.

La voz de alarma se dio poco antes de las siete de la mañana. Un vecino llamó al 112 y advirtió de que salía humo del portal del bloque de viviendas al que inmediatamente se desplazó un camión de bomberos, que ayudados de linternas se adentraron en el portal y comprobaron que se habían iniciado las llamas en el cuadro de la instalación eléctrico situado en el mismo portal.

Rápidamente, el fuego fue extinguido y ni siquiera hizo falta desalojar a los vecinos, que pudieron continuar en sus casas, eso sí, con problemas en el suministro eléctrico derivados de los daños que las llamas ocasionaron a la propia instalación, pero en ningún momento perdieron la calma por los hechos sobrevenidos.

Como medida de prevención, una ambulancia sin médico se trasladó hasta el lugar del suceso, pero tras comprobar que nadie precisaba de asistencia sanitaria dio su labor por concluida. Asimismo, efectivos de bomberos del parque de San Martín del Rey Aurelio, que salieron con la intención de reforzar a los de La Morgal que inicialmente se trasladaron hasta el lugar, dieron la vuelta a mitad de camino tras ser advertidos de que las llamas ya habían sofocadas y no había riesgos de que la situación empeorara.

Este suceso sin graves consecuencias se suma a otros recientes en el municipio en los que, por suerte, los bomberos tuvieron una actuación relativamente plácida. Fue el caso de una falsa alarma vivida la semana pasada en un bloque de viviendas de la avenida de Langreo de El Berrón, cuando los bomberos se limitaron a certificar que el escape de gas alertado por algunos vecinos no era tal. Hecho al que hay que sumar una intervención justo al día siguiente en Xixún en la que los profesionales tuvieron que extinguir un fuego iniciado en el lavadero de una vivienda.