La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Pruvia pide más información sobre el futuro del centro social de Soto

"Han pasado de decir que es un muerto con el que no pueden a invertir 50.000 euros sin consultar", afirma el portavoz vecinal

Pruvia pide más información sobre el futuro del centro social de Soto

El anuncio del equipo de gobierno de invertir 50.000 euros en la rehabilitación del centro social de Soto de Llanera para convertirlo en un espacio abierto a todos los vecinos del concejo no ha sentado bien en el seno de la Asociación de Vecinos de Pruvia (Asvepru), especialmente por el hecho de que nadie les ha dicho nada del asunto. "La participacion ciudadana brilla por su ausencia", manifestó, quejoso, el presidente de la asociación, Manuel Valcárcel.

Según su opinión, se trata de forma diferente a los vecinos de la urbanización que a los del resto de la parroquia de Pruvia. Y pone como ejemplo que el Ayuntamiento de Llanera se reunió con el consejo rector de Soto y, en cambio, la asociación de vecinos se ha enterado por la prensa. "Está bastante claro: un equipamiento que pretende ser público se chanchullea con una entidad privada", dijo.

Para el portavoz vecinal, si, como dice el equipo de gobierno, "se trata de algo tan positivo, no se entiende que no hablen con una parte del pueblo que se supone que va a ser beneficiada, resulta muy sospechoso". Curiosamente, el pasado 4 de octubre tuvo lugar una de las reuniones de miembros del equipo de gobierno con los vecinos de la parroquia, en la que "no dijeron ni esta boca es mía; y eso fue hace tres meses, no fueron capaces de decir nada al respecto".

Valcárcel recordó que "quien representa globalmente a los vecinos y al interés general de la parroquia de Pruvia es la asociación de vecinos, por mucho que le moleste al Ayuntamiento o al consejo rector de Soto; lo lógico es que, si vas a hacer una cosa en un pueblo, lo pongas en conocimiento de todo el pueblo, y que sea el pueblo el que decida, no una parte del pueblo; hacerlo de otra manera no tiene ni pies ni cabeza".

El centro social de Soto había sido adquirido por el Ayuntamiento de Llanera durante el mandato de José Avelino Sánchez, del PP, entre fuertes críticas de la oposición y parte de los vecinos.

Llegado el cambio de gobierno, que aupó a la Alcaldía a Gerardo Sanz, el asunto del centro social estaba todavía en el aire y el equipo de gobierno municipal encargó un informe para conocer todas las opciones legales que se podían barajar para dotar de contenido al edificio.

En dicho informe se pusieron de manifiesto bastantes dificultades legales que hasta ahora habían quedado en el aire. Pasado el tiempo, a Manuel Valcárcel le llama la atención lo que considera un cambio de rumbo del equipo de gobierno de Llanera porque "en un año y medio han pasado de decir que esto es un muerto y no hay quien pueda con ello a invertir 50.000 euros sin consultar con la parroquia ni contar nada a la asociación de vecinos de Pruvia, sin llegar a ningún tipo de consenso, o sin ni siquiera saber si eso se puede hacer".

Asimismo, el portavoz de la asociación se pregunta por qué el consejo rector de Soto quiere que el equipamiento sea municipal y al mismo tiempo le exige al Ayuntamiento que pague la cuota de comunidad de la urbanización.

El portavoz vecinal invitó al Alcalde a que convoque una asamblea en Pruvia para "dar explicaciones, que dé la cara".

Por último, Manuel Valcárcel añadió que incluso el nombre del equipamiento puede ser objeto de controversia, ya que "el edificio pertenece a Santolaya, y lo lógico sería que se le pusiera ese nombre; supongo que ni en este punto nos podremos poner de acuerdo", concluyó.

Compartir el artículo

stats