Los niños del colegio San Félix de Candás no utilizan libros para estudiar. El profesorado goza de "libertad metodológica" a la hora de plantear sus clases sin salirse de la programación establecida. Esta decisión conlleva que los alumnos estén más motivados y se impliquen más en las materias, explica Begoña García, directora del centro. Gracias a este sistema educativo, los pequeños ya tienen nociones de robótica sin llegar a 12 años, conocen a la perfección la realidad aumentada y se desenvuelven como pez en el agua a la hora de programar y utilizar las nuevas tecnologías.
"Es la educación del siglo XXI, de la convivencia y la innovación, y todo ello desde un punto de vista lúdico", indica la directora del colegio candasín. La robótica y la realidad aumentada ya fueron trabajadas en el aula durante el pasado curso escolar, cuando los pequeños desarrollaron su proyecto "San Félix Patria querida", que abarcó todas las materias y que será presentado mañana, viernes, en el recinto ferial Luis Adaro de Gijó, dentro de la programación de la I Feria de la Innovación Educativa.
Con "San Félix Patria querida", los alumnos han conocido mejor su región, y en todas las materias: desde plástica hasta llingua, pasando por geografía y matemáticas. Y todo ello con las nuevas tecnologías de por medio.
Los pequeños conocieron el Museo Antón y el Nicanor Piñole de Gijón, realizaron labores de arqueología y antropología, viajaron por la historia y prehistoria de Asturias, y conocieron el traje y la arquitectura típicos de Asturias. También tuvieron tiempo para dibujar un mapa del concejo con sus parroquias y analizarlo a través de realidad aumentada, y estudiaron los ecosistemas a través de códigos Qr. En clase de asturiano aprendieron vocabulario sobre animales, la casa y la familia, entre otros, y también tuvieron tiempo para "ser empresarios". "Tras un estudio determinaron qué tipo de negocio era el ideal para Candás, las tiendas de souvenirs y productos típicos, como las marañuelas", indicó Begoña García. Precisamente, los pequeños todavía ayer elaboraban marañueles de plastilina porque mañana tendrán que hacer más en Gijón, eso sí, con la receta tradicional, "de las de verdad", precisó el pequeño Lucas Prieto.
Oliver Jordán, Daniela Villegas, Daniela García, Martina Méndez, Marina González, Lucas Prieto, María Estrada y Alejandro Álvarez diseñan varios tipos de marañuelas. Entrecruzan trozos de plastilina de colores al tiempo que Álvaro Correas y Aitana Echevarría aprenden las parroquias del concejo y sus peculiaridades con realidad aumentada. Colocan sus tablets sobre una cartulina y, en ciertos espacios, les permite acceder a videos como, por ejemplo, uno de la Banda de Gaitas de Candás. "Es muy divertido aprender así", expresa uno de los niños que ayer aún ensayaban parte del trabajo que presentarán en Gijón.
Los alumnos no están nerviosos ante el acto de mañana en el recinto ferial Luis Adaro teniendo en cuenta que ya están acostumbrados a utilizar las nuevas tecnologías. Estos pequeños adquieren de una manera "innovadora" los conocimientos que suelen impartirse en otros centros educativos; eso sí, sin libros y "más motivados", como recalca la directora del colegio. "Esas técnicas que empleamos favorecen el aprendizaje, los alumnos aprenden más rápido", concluyó García.
