El proyecto de renovación del entorno del Paraguas, que sumará una gran plaza pública, incluirá finalmente una zona de servicios para la estación de autobuses de Pola de Siero, ya que el edificio actual será derribado. El plan inicial no incluía este espacio y el diseño inicial de la parte baja del Paraguas era cerrado y sin utilidad. Pero se ha decidido aprovecharlo para albergar la estación.

La corporación de Siero, con el alcalde, Ángel García (PSOE), al frente, fue consciente de que tenía que dar solución a la estación una vez se proceda a la demolición de sus instalaciones. Así que decidieron trasladar los servicios a la planta inferior, donde habrá una cafetería con despacho de prensa (73 metros cuadrados) y una sala de espera (50). Incluirá también cocina, un cuarto de limpieza y tres aseos (uno para discapacitados).

La superficie útil es de 244,27 metros cuadrados y la construida, de 297,69. En el exterior se adecentarán otros 277 metros cuadrados.

Otra modificación con respecto al proyecto inicial es que se incluirá una rampa para minusválidos. El coste de las obras ronda los 775.000 euros. El plazo de ejecución es de cinco meses y el equipo de gobierno confía en que a principios de junio pueda licitar ya los trabajos, una vez que entre en vigor la modificación de crédito aprobada ayer en el Pleno, en la que se destinan 475.000 euros para la construcción de la estación de autobuses. Así que el Alcalde calcula que las obras empezarán en otoño. El arquitecto municipal, Benito Díaz, reconoció que los trabajos de rehabilitación del singular Paraguas del ingeniero Ildefonso Sánchez del Río, que finalizarán en breve, se han demorado porque "hubo complicaciones", ya que "estaba peor de lo previsto" por los técnicos.