El Instituto de Enseñanza Secundaria (IES) Peñamayor, de Nava, sufrió un asalto el pasado domingo por la tarde. Los ladrones rompieron una ventana y, una vez dentro, tras destrozar varias puertas, entraron en los despachos de Administración con un único y exclusivo objetivo: llevarse dinero.

Había varios aparatos electrónicos como ordenadores y teléfonos móviles, y otros objetos de valor, pero los ladrones solo buscaban dinero, y no se llevaron nada más.

El director del centro educativo, Luis Gutiérrez, explicó que, tras romper una de las ventanas laterales del centro, los ladrones entraron en los despachos y lo revolvieron todo hasta que encontraron lo que buscaban. Antes, habían destrozado el sistema de alarma, y en la búsqueda rompieron también un archivo.

El director explicó que, unas semanas más tarde, los ladrones no se hubieran encontrado dinero en el centro, pero en este momento , como es fin de curso, había dinero de las fotocopias del trimestre, y del pago de excursiones u otras actividades que habían realizado los alumnos, y se lo llevaron todo.

Gutiérrez considera que los ladrones "sabían muy bien dónde buscar" y que "no deben de ser muy nuevos en este asunto". Porque, según asegura, tuvieron que actuar muy rápido. "Se nota además que iban a lo que iban, las aulas ni las tocaron, si llegan a ser críos haciendo el gam berro habrían dado vueltas por el edificio, y esta gente entró a los despachos, a la secretaría, la parte económica, cogieron el dinero y se largaron".

En su opinión, tuvieron que ser rápidos porque, una vez que destrozaron la alarma sabrían que alguna señal iba a dar. Además, tiene claro que los ladrones eran "gente ágil, viendo por dónde pasaron, las ventanas eran bastante altas y no era de acceso fácil".

Los docentes del centro se encontraron con los daños ayer por la mañana e inmediatamente cursaron la denuncia. Poco después de la denuncia, la Policía Científica acudió a tomar huellas y buscar pesquisas para iniciar la investigación.

Esta era la primera vez que el Instituto Peñamayor de Nava sufría un robo. Y aunque todavía está por saber el coste definitivo del asalto, todo indica que, como suele ser habitual, los daños causados en el mobiliario serán más costosos que el dinero robado.