Las expropiaciones para construir la rotonda del Castro de Lugones son inminentes. El Consejo de Gobierno del Principado ya ha dado luz verde -de carácter urgente- al proyecto, por lo que se espera que el proceso, que afectará a un total de ocho propiedades, comience en las próximas fechas. Además, y paralelamente, el gobierno local ya ha iniciado los trámites de licitación de las obras, que de momento no tienen fecha de inicio. Se estima que el coste de las expropiaciones ascenderá a 359.797 euros, mientras que el presupuesto para la glorieta es de 349.308 euros.

Aunque ya es público el visto bueno del Consejo de Gobierno, para comenzar a trabajar en las expropiaciones el Ayuntamiento debe esperar a recibir la confirmación por escrito, trámite que confía en que se cumpla a lo largo de esta semana. A partir de aquí se citará a los propietarios, que podrán presentar alegaciones al plan, y se formalizarán los depósitos, lo que ya permitiría ocupar los terrenos.

Las previsiones del gobierno local es que, poco después de formalizar las expropiaciones puedan comenzar las obras. Para ello ya han iniciado de forma paralela la licitación de las obras, a fin de abreviar el proceso de construcción del proyecto estrella de los presupuestos de 2018.

Y es que la construcción de la rotonda del Castro es una de las viejas demandas vecinales de Lugones, para evitar los atascos que se forman entre la avenida de Gijón y la entrada la avenida de Les Bellotines (tramo urbano de la SI-3, carretera a La Fresneda pueblo).

Además, esta infraestructura favorecerá la mejora de los accesos a Malvarán. Una vez finalizada la obra -previsiblemente en 2019-, el gobierno local planea urbanizar los escasos 50 metros que quedarán entre la glorieta y la urbanización; tarea que le correspondería acometer a los propietarios de los terrenos anejos, pero que Siero prefiere asumir en favor del urbanismo local. Se prevé que este vial tenga acera e iluminación a ambos lados.

Pero los beneficios de la infraestructura no acaban ahí. El Consistorio también espera que la nueva glorieta sirva para impulsar el desarrollo industrial de la zona norte de la localidad. El PSOE confía en que su construcción, unida a la modificación en la normativa que permite el uso comercial de estas parcelas, sea el impulso definitivo que permita su explosión empresarial.

Los planes de construcción de la glorieta llevaban más de una década cogiendo polvo en un cajón. Y es que su puesta en marcha estaba supeditada al desarrollo urbanístico del entorno; algo que con la crisis, no nunca llegó. Ahora, la intención del Ayuntamiento es que si en el futuro los propietarios de la zona desarrollan sus parcelas conectando sus accesos a la glorieta de El Castro, abonen una parte proporcional del coste de la obra.