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Aprovechar la creciente demanda de carne de potro en Europa, reto de Asincar

Asturias tiene el mayor número de explotaciones de España, aunque son pequeñas, y el país apenas consume: "Es una cuestión cultural"

Mayte Villastrigo, en el centro tecnológico de Asincar, en Noreña. M. MENÉNDEZ

Aumentar el consumo y mejorar la producción de carne de potro es el próximo reto que se ha marcado la Asociación de Industrias Cárnicas (Asincar), cuyo Centro Tecnológico Alimentario coordina un proyecto nacional en esta materia, subvencionado por el Ministerio de Agricultura. El objetivo, que las numerosas explotaciones locales aprovechen el incremento de la demanda de carne caballar en Europa.

Asturias es una de las comunidades españolas con mayor número de explotaciones equinas cárnicas, aunque el número de ejemplares por explotación es pequeño . Si en el país hay 31.371 explotaciones, el 27,8% se ubican en el Principado, seguido de Castilla y León, con el 25,5%. Pero la mayoría de los cebaderos están en Levante y Cataluña. Son datos del Ministerio de Agricultura referidos al año pasado.

Mayte Villastrigo Unibaso, coordinadora de Asincar, explica que "en España hay un bajo consumo, pero es el mayor productor en Europa". Se exporta, principalmente, a Italia, aunque este alimento también gusta en Bélgica y Holanda, al igual que en los países asiáticos. Pero aquí no acaba de cuajar. Por ejemplo, se estima que cada español consume 0,3 kilos al año, frente al 1,1 de los italianos. En España tiene una dura competencia en el consumo de carne de cerdo, que asciende a los 12,55 kilos por persona al año, y en el de vacuno, con 6,6 kilos.

De ahí que en Noreña se estudie por qué no triunfa la carne de potro cuando, además, destaca Villastrigo, a quien la prueba le suele gustar. "Creemos que es una cuestión cultural, porque el caballo se asocia más a compañía y no a consumo", apunta. Este grupo operativo quiere trabajar en lo que se llama la cadena de valor, que alude a las explotaciones y a los comercializadores, para mejorar la explotación cárnica de los caballos.

Mayte Villastrigo agrega que el consumidor suele tener "dificultad para encontrar carne de potro", pues en la mayoría de las ocasiones hay que acudir a carnicerías especializadas y sólo algunos supermercados la ofertan. Influye en la reticencia para comer este alimento "el desconocimiento del consumidor de que hay explotaciones de equino y que ofrecen unas garantías". Añade que hay poca información sobre sus propiedades nutricionales. Mayte Villastrigo las detalla: "bajo porcentaje en grasa, es muy proteica, tiene alta concentración de grasas buenas (poliinsaturadas) y es rica en hierro". Además, son explotaciones ecológicas porque son animales que se alimentan en extensivo, en el monte o pastos comunales.

La coordinadora de Asincar destaca que "ahora hay una demanda grande en Europa, pero no son capaces de cubrirla", por lo que puede ser una apuesta de futuro en el campo. La caída de las exportaciones norteamericanas a Europa y el auge de la alimentación saludable son algunas de las razones del aumento de la demanda, que ha acarreado también que el precio se equipare al de la carne de vacuno.

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