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Villanueva, a la puerta de su negocio.R. M. M.

Llagar centenario en Lugones

Sidra Fran celebra su siglo de vida con una edición especial de la cosecha y con perspectivas de mantener la tradición familiar

Sidra Fran cumple 100 de historia, lo que le convierte en uno de los llagares más veteranos de la región. Fue Francisco Villanueva quien lo fundó hace un siglo, época en la que había más bodegas en Lugones, y hoy sólo queda ésta. Era un hombre menudo, que logró convertirse en un referente sidrero. La familia conserva algunas de las fotografías en las que el promotor de este llagar aparece espichando o probando la calidad de sus caldos con clientes y amigos.

Francisco Villanueva no tenía hijos, así que no pudo legar a su descendencia más directa el negocio. No podía imaginar que, a pesar de ello, sus familiares seguirían al frente del llagar 100 años después. Tras su fallecimiento, quedó para una cuñada suya, que era la hermana de su mujer, María del Valle, y abuela de los actuales propietarios. De ella pasó al padre y tíos de estos: Víctor, Roberto y María Ángeles (Maruja) Ramos del Valle. Unos y otros han sabido conservar la esencia de este llagar emblemático de Lugones. Hoy siguen al frente Javier y Víctor, en la bodega, y Beatriz, Raquel y Mercedes, en la sidrería. Conservan el bar que Francisco Villanueva montó como complemento al llagar.

Javier Ramos echa la vista atrás: "el bar se conserva como estaba, y también la antigua bodega". Apunta que, aunque se han modernizado las instalaciones, siguen elaborando la sidra "como antes, aunque con técnicas más modernas" y acordes a los nuevos tiempos, explica. En Lugones sólo queda este llagar, aunque entonces, en 1918, había otros dos o tres más, indica Javier Ramos.

En Sidra Fran no quieren dejar pasar por alto su centenario, así que tienen previsto sacar una edición especial conmemorativa con la cosecha de este año. "Queremos hacer algo más, estamos mirando a ver...", indica Ramos. Él empezó a trabajar en la bodega familiar con 17 años, aunque llevaba trasteando por ella desde que era un crío. Son 11 sobrinos, así que confía que "si alguno no tira por el llagar, malo será". Cree que Sidra Fran pueda seguir cumpliendo años durante mucho más tiempo. Parece que hay relevo.

Una de las cuestiones que más ha cambiado en este siglo, y que sorprenderían a su fundador si levantara la cabeza, es que "se mejoró mucho el control de las fermentaciones, temperaturas y las manzanas", apunta Javier Ramos. Explica que "se controlan más los procesos, incluso en la recogida de manzanas, por variedades". Lo que sí se ha perdido casi es que "antes venía más gente a probar, pues era muy típico venir a probar al llagar", y es una costumbre cada vez más en desuso. A Fran también le sorprendería "cómo avanzó" el sector y "la maquinaria, pues antes era más manual, aunque se sigue haciendo el mismo proceso artesanal", señala uno de sus sucesores. Cree que es difícil iniciarse ahora en la elaboración de sidra por la inversión que requiere, por la competencia que tienen, los escasos márgenes comerciales y porque se vende menos. De hecho, "hace unos 15 años que no abre ninguno", apunta.

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