Una pareja y una mujer, los tres camareros, se sentaron ayer ante el juez en Pola de Siero tras cruzarse denuncias por agresiones. El fiscal pidió ayer la libre absolución de la camarera y la condena de la pareja, para quienes la abogada de la primera reclamó una indemnización de 6.657 euros por lesiones y 200 euros de multa.
Los hechos ocurrieron el pasado verano en una sidrería de Lugones, donde los tres implicados acabaron en una pelea en la que no faltaron puñetazos, arañazos y tirones de pelo, en atención a la versión que ofrecieron en el juzgado.
La pareja responde por un delito de lesiones contra la camarera, que en ese momento (julio del año pasado) trabajaba en el local. Los tres son empleados de hostelería. El hombre, trabajador ocasional de la sidrería donde ocurrieron los hechos y con antecedentes penales, acudió a la misma con su pareja.
Ésta última no mantenía una relación especialmente cordial con la camarera desde que habían sido compañeras de trabajo en otro local de hostelería de Lugones. La pareja había acudido a tomar una cerveza al establecimiento, según expusieron. La camarera, a sabiendas de su mala relación con la mujer, decidió no ir a atenderlos, dejando esa función en manos de una compañera.
La pelea se inició minutos después. Según la acusación, ocurrió cuando quiso pedirles que se fueran del local, al considerar que se estaban riendo de ella. Por contra, los supuestos agresores aseguran que fue la camarera quien abordó a la mujer por atrás, tirándole del pelo y haciendo que cayera del taburete en el que estaba sentada.
Las dos mujeres se enzarzaron en una pelea, a base de tirones de pelo y arañazos. Pasados unos minutos, y siempre según el testimonio de la trabajadora y un testigo, el hombre se abalanzó sobre ella, propinándole varios puñetazos en la cara y diciendo "te voy a reventar".
Esta agresión, tal y como refleja el informe del forense, le provocó dos cicatrices de consideración en la cara y en la ceja.
A pesar de que los acusados presentaron denuncias aludiendo a una versión diferente y haber sido también atacados, el Ministerio Fiscal pide su condena y la libre absolución de la trabajadora. Por su parte, la abogada de la camarera, pide una indemnización de 6.657 euros por las lesiones y 200 euros de multa.
