"Si cuando a los padres nos preguntan algo, estamos mirando al móvil, ¿qué ejemplo damos?". Lo pregunta la psiquiatra gijonesa María Jesús Antuña, que acudió a Noreña a impartir una charla para los padres del Colegio Nuestra Señora de Covadonga. Antuña expuso a los progenitores algunas de las nuevas adicciones, propiciadas por las conductas propias del siglo XXI, que frecuentemente afectan a jóvenes adolescentes. Entre ellos, el juego patológico, la adicción a los videojuegos, el móvil, la compra impulsiva o internet.
Según planteó la psiquiatra, los adolescentes tienen una personalidad más tendente al narcisismo y a las conductas antisociales. Su carácter impulsivo les lleva a tomar decisiones poco planificadas y a tener comportamientos considerados socialmente inadecuados. Además, pasan por una etapa de baja autoestima, timidez y tendente a fobias sociales, Esto les convierte en una diana perfecta para las adicciones.
Entre ellas, la ludopatía, denominada por Antuña como "juego patológico", que es la más extendida entre ellos. Otra de la adicciones relacionadas, es el juego online. Este problema se refiere a personas que dedican a esta actividad más de tres horas diarias: "Empiezan jugando como vía de escape y entretenimiento, pero terminan jugando para no sentir malestar", destaca Antuña.
Otro de los aspectos en los que quiso incidir la psiquiatra fue la adicción al móvil. Esta genera la llamada "nomofobia" o miedo irracional a salir de casa sin el móvil. Los datos del Instituto Nacional de Estadística sustentan la preocupación de Antuña a este respecto, indicando que casi la mitad de los niños entre 11 y 14 años disponen de su propio teléfono. La experta señaló que lo ideal sería que los jóvenes no tuvieran un móvil propio hasta los 15 años. La adicción a internet genera problemas con las redes sociales o el cibersexo, alertó la psiquiatra, llegando a casos extremos, en los que funciona como motivación de una conducta homicida.
Antuña, a través de varias frasees, quiso implicar a los padres en este problema, abriendo un debate sobre los límites que deben imponer.
