La Asociación de Vecinos de Rozaes de Villaviciosa, entusiasta en la recuperación de tradiciones y de la cultura popular, celebró ayer Domingo L'Gordu, una antigua celebración rural de mazcaraos con siglos de tradición, conservada en algunos pueblos asturianos.

La mazcarada contó con casi una treintena de vecinos que salieron ataviados con trajes de raros personajes del pasado con palos, caretas con figuras animales y vegetales, cencerros o gorros con forma de cucurucho con cintas. Los mazcaraos recorrieron casa por casa los barrios de Sampedrín, Sopeñes, Fabares, Morvís, Triás, Sanzornín, Villanueva y Piñera, para "asustar" a sus vecinos, tal y como hacían sus antepasados. Como manda la tradición fueron convidados por los vecinos a dulces típicos de Carnaval, como fayueles, casadielles, buñuelos y picatostes. "Estamos muy contentos porque este año participaron muchos neños. Esto ye señal de que estamos plantando una buena semilla con ellos, y no vamos a perder esta tradición tan guapa y nuestra", destaca Eva Solares, de la asociación de vecinos de Rozaes.

Una tarde con fin de fiesta antroxero y sidrero en Casa Eladia, en la que todos se lo pasaron de miedo, en otra buena iniciativa del colectivo vecinal, que ha recuperado en los últimos años esta ancestral tradición asturiana del antroxu, que antaño era muy celebrada también en otros pueblos de Villaviciosa.