El alcalde de Pravia, David Álvarez, requiere a la consejería de Desarrollo Rural y Cohesión Territorial que concrete si el camino provisional de obra que se habilitará para reparar el puente de Quinzanas servirá para el uso de los vecinos. Es la principal incertidumbre que tienen los residentes de la zona, que utilizan a diario la infraestructura, clausurada desde el pasado uno de enero ante el riesgo que presenta y cortada también al paso peatonal tras hundirse una de las pilastras en el río Narcea.
El cierre obliga ahora a los vecinos a dar un rodeo de 20 minutos por San Román de Candamo para llegar a Pravia. “La previsión es que la obra finalice el próximo septiembre, pero queremos saber si antes de eso los vecinos van a disponer de algún tipo de paso que mejore sus comunicaciones y movilidad con la villa”, afirma el regidor, que ayer se puso en contacto con la consejería para aclarar el uso del paso que será instalado, sin obtener una respuesta clara.
El paso alternativo que se habilitará se compondrá de una batería de marcos de hormigón que ya había sido encargada con anterioridad, cuando se proyectó la mejora de la infraestructura, prevista en el presupuesto autonómico de 2021. El acceso provisional será entregado en un plazo de dos meses. De ahí, las dudas vecinales. Quieren saber si se instalará una vez que sea recibido, en torno al mes de marzo, y si podrán utilizarlo, puesto que también parece que se plantea su necesidad para acceder a la zona de la pilastra afectada.
El alcalde de Pravia quiere que los trabajos comiencen cuanto antes “y si es posible se acorten los plazos”. Todo para conectar cuanto antes Quinzanas y Pronga con la carretera AS-39, que les deriva a la villa praviana. Según explicó el jueves el Principado, los informes técnicos recomiendan ejecutar las labores en verano para evitar las crecidas del caudal por deshielo, lluvias o las sueltas del embalse de Soto de La Barca (Tineo) ya que será necesario desviar el cauce durante los trabajos. También aconsejan respetar la temporada de pesca tradicional, de abril a mediados de julio. Por lo que las fechas dejan poco margen a los adelantos.