Colectivos y particulares de Villaviciosa han puesto en marcha el proyecto “El Valle solidariu”, una iniciativa cuya finalidad es el desarrollo de campañas para colaborar con entidades sociales que, a través de comedores, repartos u otros servicios, presten ayuda a personas y grupos vulnerables o desfavorecidos. Este plan, que ya echa a andar este mismo mes de febrero, cuenta con el respaldo, entre otros, de la asociación vecinal del Valle de Peón y Candanal, en cuya sede se podrán depositar las donaciones.

El proyecto, sin ánimo de lucro y que se apoya en el voluntariado, consistirá en la recogida de alimentos no perecederos y útiles de aseo. Aunque todo lo aportado es bienvenido, se necesitan, principalmente, según los responsables de la iniciativa, leche, cacao, galletas, cereales, legumbres, verduras, conservas, tomate frito, aceite, pasta o arroz. Para higiene personal, proponen donar jabón de tocador, pasta de dientes, gel o champú.

Este mes de febrero, las donaciones podrán depositarse en la sede de la asociación de vecinos durante los días 12, 13 y 14 de febrero. Habrá más campañas en los meses de junio y octubre.

Una vez finalizada la recogida y hecho el balance de las donaciones –que serán anónimas– se entregará a la entidad que, en este caso, se ocupará del reparto a quienes más lo necesitan y que será Cruz Roja de Villaviciosa. Se expondrá, además públicamente, a través de un bando, la cuantía de lo recaudado.

Por otro lado, la asociación de vecinos del Valle de Peón y Candanal, homenajeó el pasado viernes a dos personas muy queridas de Villaviciosa: el cartero Luis Elías Rodríguez y María Luisa Meana Pidal, de 81 años.

María Luisa Meana Pidal, homenajeada por el colectivo.

Rodríguez se jubila tras 39 años de trabajo en Correos, los últimos 13 en estas dos parroquias maliayesas, y que recibió una placa de agradecimiento del colectivo. “Fue un reconocimiento a los años de servicio como cartero en el Valle de Peón y Candanal. Se lo merece por su profesionalidad y buen hacer”, explicó el presidente de la entidad, Eliseo Vallina.

El homenajeado no pudo evitar emocionarse. “No me lo esperaba, estoy contento y agradecido por sentir el aprecio y cariño de los vecinos”, aseguró Rodríguez.

Otro reconocimiento fue para María Luisa Meana Pidal, nombrada “socia de Honor 2020” de la entidad. “Es una vecina muy querida. Lleva toda su vida, desde niña, dedicada al bar tienda Curbiellu, que ya heredó de sus padres, y ya merecía nuestro homenaje. Fuimos a entregárselo a su establecimiento”, explicó Vallina. Ella recibió una placa de madera y una reproducción de la fachada del Ayuntamiento de Villaviciosa. “Me presta mucho que os acordéis de mí, os estoy muy agradecida”, dijo, visiblemente emocionada”.