El Ayuntamiento de Noreña y el colectivo Huellas Callejeras Noreñenses trabajarán de forma conjunta para ordenar y señalizar convenientemente las colonias felinas en la Villa Condal. En la actualidad, hay contabilizadas cinco colonias de gatos callejeros, con unos setenta animales que son alimentados y llevados al veterinario para su castración y cuidado sanitario por los voluntarios de la asociación, acogidos desde hace unos años al denominado método CES (captura, esterilización y suelta).

Ayer mismo se procedió a colocar señales en los puntos en los que se alimenta a los animales, “para hacer una labor de difusión, que los vecinos sepan que estos gatos están alimentados y que no se trata de un foco de problemas, sino que se trabaja para cuidarlos”, explicó el concejal Pelayo Suárez. Fue después de que una operaria municipal colocara un nuevo comedero para los felinos, reutilizando para ello una rueda vieja con un plástico como techo para que los animales puedan comer bajo techo y refugiarse.

Tal y como señalan Cristina Fernández y Verónica Maluenda, voluntarias de Huellas Callejeras Noreñenses, se necesitan más apoyos. “Sería bueno que hubiera más voluntarios para ayudar a alimentar a los gatos y a capturarlos para llevarlos al veterinario cuando es necesario”, exponen, animando, además, a que “quien quiera donar, sepa que no solos se trata de dinero, también es posible hacernos llegar pienso y materiales”.

La primera colonia señalizada ayer fue la que se ha acondicionado tras el Centro de Salud de la villa, donde “no hay un ratón gracias a los gatos”. “Gracias a la labor de esterilización, cada vez hay menos animales callejeros, tenerlos controlados es un trabajo muy importante, porque, contrariamente a lo que piensa la gente, ayuda a que se reproduzcan menos y no al contrario”, destacan las voluntarias.

La campaña de información del Ayuntamiento de Noreña incide, precisamente, en que “las colonias felinas son seguras y ayudan a una convivencia saludable en un entorno controlado”.