El Coro Nordeste, baluarte candasín de la canción marinera

El Coro Nordeste nació con el propósito de recuperar las canciones de bodega y chigre que antaño se entonaban, no siempre afinadas, en las antiguas fábricas de conservas que durante años fueron el motor económico de Candás. Habaneras, temas marineros o boleros que, si bien fueron pasando de generación en generación, habían comenzado a perderse, cayendo en el olvido de una sociedad en la que cada vez era más difícil escuchar a alguien cantar en un chigre.

Sus primeros pasos fueron en forma de ochote y estuvieron ligados al certamen coral "Canciones de la bodega", el cual ganaron en diversas ocasiones, hasta el punto de que en los últimos años estuvieron ligados al mismo, pero sin ejercer como participantes. Poco a poco, fueron incorporando nuevos integrantes y, con ellos, más instrumentos. "Comenzamos con dos guitarras y, a día de hoy, ya tenemos tres y un acordeón", explica el director del coro, Alfredo Pérez, más conocido como "Rodada".

La agrupación candasina logró pronto dar "con la tecla correcta" y en tan solo unos años pasaron de cantar en el chigre a hacerlo en escenarios de todo Asturias, como la Torre del Reloj de Luanco, el club Santolaya de Gijón o la calle Gascona de Oviedo. También han actuado en Avilés, Navia, Vegadeo o Somao. "Parece que lo estamos haciendo bien, porque cada vez nos salen más actuaciones", afirma Pérez. En sus conciertos pueden escucharse desde habaneras a boleros, pasando por las más populares canciones marineras.

“La canción marinera sigue gustando mucho, hay un sentir popular entre la gente que hace que todavía cale”, opina el director candasín, para quien lo más importante durante un concierto es lograr "una simbiosis con el público". "Me gusta cantar, pero también ver que la gente está en sintonía y disfrutando", subraya. 

Para lograrlo, el grupo ensaya un día a la semana, normalmente los miércoles, aunque en épocas de conciertos pueden quedar hasta dos días. "Estoy encantado con mi gente", asegura Pérez, encargado de dirigir actualmente a un grupo de unos doce componentes, con una media de edad de sesenta años. "Hay un chavalín que es más joven, pero los demás peinamos canas. Somos los últimos roqueros", bromea Pérez.

Todo este esfuerzo por defender, promover y divulgar la canción marinera ha tenido sus frutos y el Coro Nordeste recibirá próximamente el "Urogallo" del Centro Asturiano de Madrid. "Nos sorprendió muchísimo, es un galardón muy importante. Nos ha hecho una gran ilusión, un orgullo que compartimos con nuestro pueblo", sentencia el direcrtor de uno de los grandes emblemas musicales de Carreño.