Las obras de soterramiento de las vías de la antigua Feve en Langreo entran este mes en una nueva fase. La excavación del túnel por el que circulará el tren comenzará antes de que concluya junio. Los trabajos se extenderán durante ocho meses por lo que concluirán en febrero del próximo año, según aseguraron fuentes de la Consejería de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente. El plazo de ejecución de las obras de vaciado del túnel se dilatará, prolongándose tres meses más de los previstos inicialmente.
Los trabajos se centrarán en el vaciado del paso subterráneo que permitirá soterrar el trazado de la línea Gijón-Pola de Laviana y liberar los terrenos de superficie para configurar nuevos espacios urbanos. Previamente se instalaron los pilotes y sobre ellos la losa. En los próximos meses se extraerán 236.679 metros cúbicos de tierra del interior del túnel, que tendrá 1.790 metros de longitud.
La eliminación del corsé férreo de Langreo arrancó de forma oficial a finales de 2009 aunque hasta agosto los trabajos se centraron en tareas auxiliares, como el traslado de conducciones de servicios afectadas o la retirada de las playas de vías. El plazo establecido en el proyecto para la ejecución de la actuación era de 35 meses.
La firma adjudicataria del soterramiento -la unión temporal de empresas (UTE) integrada por Comsa y Contratas Iglesias- inició en el verano de 2010 la cimentación del falso túnel. Las máquinas perforadoras horadaron el suelo para introducir pilotes estructurales de dos tipos: impermeabilizantes y estructurales. Estos elementos componen las paredes de la galería, que sostienen la losa. Las obras obligaron a cortar el tráfico ferroviario de Feve en todo el valle, desde Tuilla a Pola de Laviana, durante seis meses. La estrechez del barrio Urquijo motivó la interrupción de la circulación. Durante ese periodo, los operarios instalaron los pilotes y la losa en el área, pero también ejecutaron la estructura del río Candín y reforzaron el edificio Incubatic. El plazo estimado para desarrollar la actuación se cumplió de forma estricta y justo seis meses después de que se iniciase los trenes volvieron a circular por la vía desde Tuilla.
Mientras tanto los viajeros tuvieron que ser trasladados en autocares por el valle, respetando las paradas ferroviarias. El coste de este servicio fue asumido por el Principado, que se comprometió a abonar 327.141 euros a Renfe en compensación por el corte provisional (145.002 euros por la pérdida de viajeros y 182.139 euros del coste del traslado de maquinistas e interventores de la base de Laviana a El Berrón). A esta cifra se sumarán los 390.000 euros de los gastos del servicio alternativo de transporte para los viajeros.
Las estaciones
La nueva estación de Sama, en superficie, ya está terminada. La Consejería de Infraestructuras barajó inicialmente que los trenes se detuviesen, una vez reanudado el servicio tras el corte, en estas instalaciones. Sin embargo, por el momento se sigue utilizando la estación próxima al cuartel de la Guardia Civil. También La Felguera dispondrá de una nueva estación, que será subterránea.
El plazo de finalización de la obra civil es septiembre del próximo año. Sin embargo, queda por dilucidar a qué administración (nacional o regional) correspondería instalar la superestructura ferroviaria (instalación de vías, catenarias y señalización). La Plataforma por el Soterramiento de las Vías, que está integrada por asociaciones de vecinos, partidos políticos y otros colectivos, demandó en varias ocasiones un compromiso para acometer la instalación de la superestructura ferroviaria y la urbanización del espacio.
