Una discusión por no cumplir las normas de uso de la piscina acabó en agresión. Alrededor de las seis de la tarde, dos hombres agredieron a uno de los socorristas de las instalaciones de Riaño, después de que éste llamase la atención a una mujer por no utilizar el gorro obligatorio. Tras un primer forcejeo y después de propinarle los primeros golpes, acudieron a sus coches "para recoger una barra de metal y otra de madera", una cachava, como relató otro de los socorristas, Juan Carlos Sánchez. Con estos objetos contundentes le ocasionaron heridas de consideración por todo el cuerpo, aunque las de mayor gravedad se las ocasionaron en la cabeza.

El socorrista herido, David López, tuvo que ser trasladado de urgencia al Hospital Valle del Nalón debido a las lesiones, para someterse a pruebas radiológicas y recibir puntos de sutura. Los implicados huyeron del lugar, aunque agentes de la Policía Local y Nacional ya han identificado a uno de ellos, que se presume como el principal agresor. Sánchez comentó que "fue prácticamente imposible separarles. Lo intentamos, pero cuando llegaron con la barra fue muy difícil".

Varios testigos de la agresión calificaron de "vergonzosa la seguridad de las piscinas y más teniendo en cuenta a esta gente", que, aseguraron, "suelen provocar problemas y son muy conocidos en Riaño". No es la primera situación de este tipo que se vive en las instalaciones de la localidad langreana desde su apertura el pasado sábado. "Ya ayer (por el lunes) uno de ellos amenazó a mi compañero por una situación similar", recordó Sánchez, refiriéndose a uno de los dos implicados. Además, aseguró que la empresa Asomca, encargada de los servicios de socorrismo, se está planteado abandonar las instalaciones, "porque no nos podemos arriesgar a que sigan pasando cosas como ésta".

El alcalde de Langreo, Jesús Sánchez, que se personó en el Hospital Valle del Nalón para interesarse por el herido, aseguró que se interpondrá una denuncia contra los agresores e instó a los ciudadanos a "cumplir con las normas básicas de convivencia" o de lo contrario "se tomarán medidas drásticas para que no vuelvan a suceder estos actos".