La primera gran fiesta del calendario mierense ya está en marcha. Las pipas de sidra se descorcharon ayer en el parque de Jovellanos y cientos de mierenses y visitantes disfrutaron de los primeros acordes de la música folk que caracteriza a esta fiesta tan arraigada y tan identificada con la cultura asturiana. Y para abrirla, un mierense de nacimiento, un hombre al que la villa le evoca un sinfín de recuerdos, que plasmó en un emocionante pregón con el que más de uno se sintió identificado. El televisivo Laudelino Martínez fue el encargado de pronunciar un pregón en el que, para él, "llegar a Mieres significa recordar".

Serían innumerables los momentos que narró durante la lectura. Laude Martínez recordó sus motes de juventud: "Soy el Anchoa, el Espárrago, el Flaco", dijo después de haber recordado que nació en su casa de Mieres, en la calle Martínez de Vega. Tras repasar toda su trayectoria vital y evocar grandes momentos que, de una u otra forma, muchos vivieron, Laude Martínez se despidió con un "Esto ye Mieres: amigos, gente buena, gente valiente, gente dispuesta, mi gente". Y el tradicional: ¡Viva la Folixa, Viva Mieres!

El emotivo pregón dio paso a la entrega del Distintivu a la Investigación Folclórica "Fini Suárez", que se llevó la Asociación de Vecinos "Por un Cenera mejor". Posteriormente, Anabel Santiago abrió sobre el escenario las actuaciones de la Folixa, que siguieron con un festival de tonada en el que participaron Patricia Pariente, Celestino Rozada Tamés, José Antonio "Cantu la Vara" y José Manuel García.

En el entorno del parque, y también en Requejo, hubo actuaciones para amenizar la espera hasta los dos grandes conciertos de la noche. Al filo de las once, el Grupo "SEU" fue el encargado de abrir el festival. Y a las doce y media, unos clásicos del rock asturiano: "Dixebra". La banda hizo las delicias de cuantos se acercaron al Jovellanos para disfrutar de la primera jornada de la Folixa na Primavera.