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Hunosa rescata viejos proyectos para su plan de energías como la biomasa y la eólica

La hullera pretende diversificar su negocio con otras fuentes energéticas, aunque la única que sigue adelante es la geotermia con agua de mina

Anuncio de Hunosa en el polígono de Reicastro, donde se iba a desarrollar la planta de biomasa. FERNANDO GEIJO

El futuro de la hullera estatal de Hunosa pasa por no centrarse únicamente en el carbón y convertirse en una empresa global de energía. Así se deja claro en el plan de empresa hasta 2027 que recientemente se firmó entre la dirección de la compañía y los sindicatos mineros. Un plan que, en su diversificación, aludía a diversas actividades en el ámbito energético. Algunas de ellas en las que ya está inmersa, como es la geotermia o la planta de captura de CO2"; otras nuevas, como la minihidráulica o los puntos de recarga; y otras que ya se evaluaron en el pasado pero que no llegaron a fructificar, como la biomasa, la energía eólica e, incluso, el biogás.

Sin duda una de las iniciativas más ambiciosas está relacionada con la biomasa. El plan asegura que la empresa estudiara la posibilidad de poner en marcha -junto a un socio privado- una central eléctrica alimentada con biomasa. También se realizarán modificaciones en la térmica de La Pereda, que recibirá 22,74 millones de euros, para adaptarse a la normativa y poder quedar este combustible en mayor proporción.

La idea de crear una central térmica de biomasa no es nueva. Nació en septiembre de 2012 con la actual candidata a la presidencia del Principado por el PP, María Teresa Mallada, como presidenta de la compañía. Su intención era invertir 41 millones de euros para una planta de 15 megavatios y que se instalaría en el polígono industrial de Reicastro, en Mieres, cuya titularidad es también de la hullera. El cambio en la política energética del Gobierno hizo que Hunosa paralizase la iniciativa; también había problemas con el consumo estimado de la planta, de unas 128.000 toneladas al año, que no se podría garantizar con los terrenos de la hullera. Sin embargo, con un nuevo enfoque, la idea podría ser viable. De hecho, ya hay otros proyectos similares dentro del Principado. El biogás también estuvo dentro de los planteamientos pasados de la compañía con Mallada. De hecho, había un proyecto que iba a desarrollar Hunaser (participada por Hunosa y Urbaser) para construir una planta de biogás en el matadero de Gijón en colaboración con la Cooperativa de Agricultores, Consumidores y Usuarios de Gijón. De este modo, también es una energía por la que la hullera puede tirar hacia delante.

Más atrás en el tiempo se sitúan los proyectos de energía eólica dentro de la hullera, concretamente con Juan Ramón García Secades como presidente. Fue en 2009 cuando desveló que la hullera ultimaba los acuerdos para construir el primer parque eólico convencional de las Cuencas en el cordal de Longalendo, entre Aller y Mieres; y que la compañía mantenía negociaciones avanzadas para ejecutar la instalación de un parque de autoconsumo en San Víctor, en Mieres. La iniciativa se iba a desarrollar en colaboración con Endesa a través de su filial ECYL, que llegaron incluso a un acuerdo para crear la sociedad eólica de la cuenca central asturiana. Los planes no salieron adelante y generaron un buen número de críticas.

Pero no era el único acuerdo de la hullera con Endesa, que también con García Secades, habían planteado la puesta en marcha de una central de ciclo combinado en La Pereda. La eléctrica se retiró del proyecto. El julio de 2016, Industria retiró la autorización para este proyecto y el actual plan de empresa de Hunosa no hace ninguna referencia al ciclo combinado. Sí que manifiesta su apoyo por la geotermia, una energía en la que lleva trabajando con éxito desde hace algunos años ya, y que plantea su ampliación. La geotermia de Hunosa plantea el aprovechamiento del agua de las explotaciones mineras para abastecer de calefacción y agua caliente. Actualmente se desarrolla en Mieres aprovechando el agua del pozo Barredo, que ya nutre a varias instalaciones del campus de Mieres, a la sede de la Fundación Asturiana de la Energía (FAEN) y al hospital Álvarez Buylla. También se está desarrollando una red de calor que lleve la geotermia al centro de Mieres, sobre todo para abastecer a los pisos de alquiler de La Mayacina, además de otras instalaciones. Desde el Ayuntamiento de Mieres quieren ir aún más allá y que toda la villa pueda acceder. También están en proyecto su desarrollo en Langreo, en esta ocasión, a través del pozo Sotón.

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