La primera granja de pollos ecológicos de la región deberá esperar unos meses más para empezar a funcionar. La compleja tramitación del proyecto impulsado por la firma Ecopollo en El Carmen (Langreo) ha obligado a ampliar los plazos iniciales previstos para echar a andar y la previsión ahora es estar en marcha a principios del próximo año. La instalación, pionera en Asturias, prevé criar y sacrificar para su posterior comercialización entre 500 y 600 aves al mes. La inversión para poner en marcha la explotación avícola ronda los 280.000 euros.
Juan Carlos Rodríguez Revuelta es uno de los responsables del proyecto junto a su mujer Verónica Antuña (originaria de Langreo) y Rolando Sánchez Lorenzo. "Nos pidieron un nuevo estudio y eso ha demorado unos meses la tramitación, pero ya estamos en la recta final. Ahora nos encontramos a la espera del visto bueno de la CUOTA (Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio de Asturias) y, después, ya llegará la autorización del Ayuntamiento", señaló Rodríguez, que añadió: "Esperamos que todo esto quede resuelto en un plazo de un mes aproximadamente y después ya nos pondremos a adecuar la instalación y la parcela para estar funcionando en los primeros meses del próximo año".
Rodríguez argumentó que no hay ninguna granja similar en la región, dedicada a la cría y sacrificio de pollos ecológicos. Señaló que sí existen granjas de pitu de caleya, pero sin sello ecológico, e instalaciones dedicadas a la obtención de huevos ecológicos.
Sello
Lograr el sello ecológico implica cumplir unos rigurosos estándares de calidad a lo largo de todo el proceso, desde la alimentación de los pollos hasta cómo debe ser su descanso. Según esgrimió el promotor, en una granja convencional se engorda a las aves de forma rápida, para poder sacrificarlas a los 21 días, cuando alcanzan los dos kilos y medio de peso. En la futura granja se esperará a que cumplan los cuatro o cinco meses. Todo el procedimiento está estrictamente pautado: el tipo de pienso que pueden comer los pollos, las dimensiones del recinto, el espacio que tienen para dormir o cómo sacrificarlos.
Los pollos de la instalación langreana se alimentarán con piensos ecológicos, aunque también con gusanos o hierba al disponer de un amplio recinto exterior. La parcela ocupa 20.000 metros cuadrados y la nave tendrá 500. La inversión prevista es de 280.000 euros, sin contar el gasto que supuso en su día la compra del terreno para ubicar la granja.
Los impulsores de la iniciativa esperan poder obtener los permisos para ejecutar las obras en la parcela de El Carmen en lo que queda de año. La estimación es sacrificar entre 500 y 600 pollos al mes. Los pollos estarán al aire libre (salvo por las noches) y se criarán de forma natural.