"Cada vez que salgo al parque, los niños acaban pisando las cacas y tenemos que andar sorteándolas, estamos hartos". Así habla una de las vecinas de Langreo que, junto a otros ciudadanos, han decidido iniciar una campaña con carteles contra los excrementos de perros en los que exigen multas severas y animan a los vecinos para que denuncien cuando sean testigos de situaciones similares.
Los carteles, que están ilustrados con una imagen de la caca del animal desparramada por la calle, dan cuenta de la falta de concienciación que existe entre los propietarios de mascotas. "Queremos ver si la gente se sensibiliza, porque estamos cansados, y sabemos que este sentimiento está extendido por todo el concejo", apunta. Algo que se arreglaría, "con un poco de educación", señala, dando cuenta de que en el pasado "la gente hacía caso omiso de las papeleras y ahora a pocas personas se les ocurre tirar un papel o una cajetilla de tabaco al suelo cuando puede tirarlo a una papelera, pues lo mismo con los excrementos de las mascotas, deberían recogerlos y no dejarlas por ahí".
Los carteles, en lugar de estar pegados en las paredes, se han distribuido por diversos sitios del distrito langreano de La Felguera. "Hemos puesto los carteles en un banco del parque Pinín, pero también por el barrio de La Pomar y el polideportivo, la intención es que la gente los coja y los ponga donde crean que pueden ser útiles, haciendo una especie de red social", destacó, con la intención de "reconducir la situación".
El Ayuntamiento de Langreo ya trató de poner freno a esta situación con una campaña que anunció a finales del año pasado y en la que daba cuenta de las muchas críticas que había sobre este asunto entre los vecinos. En la iniciativa, que se denominó "No dejes huella. Tu perro, tu responsabilidad", el área municipal de Medio Ambiente repartió de forma gratuita varios miles de kits formados por unos recipientes con forma de hueso para llevar las bolsas con las que retirar las heces. También contaban los citados kits con unos botes que, rellenos con una mezcla de agua y vinagre, sirven para contrarrestar los malos olores y el efecto sobre el mobiliario urbano del amoniaco presente en la orina de los animales. Langreo tiene censados unos 3.000 perros, aunque los técnicos municipales estiman que la población real en el concejo puede duplicar.
