Cuatro contenedores de recogida de basura ardieron en la noche del pasado jueves en Sama, en la calle Alonso Nart, como consecuencia de un acto vandálico. La Policía Local recibió a las 23.25 horas el aviso de los vecinos de la zona que alertaban del incendio en la vía pública. Al lugar acudieron varias patrullas y bomberos del Servicio de Emergencias del Principado para sofocar las llamas. Los daños provocados por este incendio intencionado en la batería de reciclaje ascienden a 5.000 euros.

La alcaldesa de Langreo, Carmen Arbesú, condenó el acto vandálico. «Ya vimos en los últimos meses otros ejemplos intolerables de vandalismo. Van mucho más allá de la gamberrada. Las llamas ponen en peligro a los vecinos y el coste económico de reponer los elementos necesarios para un servicio tan esencial como la recogida de basuras recaen sobre el Ayuntamiento, es decir, sobre el bolsillo de todos los langreanos”, aseguró. La regidora indicó que “hay cuatro contenedores inservibles o completamente destrozados. Cada uno de ellos cuesta alrededor de 1.000 euros. Además, los Servicios Operativos nos avisan de que habrá que rebachear el pavimento, porque el asfalto quedó deformado por el calor. En total, hablamos de unos 5.000 euros en daños. Es un dinero público que no podrá dedicarse a otros fines muy necesarios por el comportamiento inaceptable de los responsables de este desaguisado», dijo Arbesú.

El Ayuntamiento colaborará en todo lo posible con la investigación policial para intentar encontrar a los autores del incendio. En el concejo se produjeron incidentes similares desde el pasado verano. Otra batería de reciclaje ubicada en el distrito de Ciaño ardió en dos ocasiones: la primera, a comienzos de agosto, y la segunda el 19 de febrero de este año. Además, en noviembre de 2020, ardieron en Sama ocho contenedores en tres puntos y en la misma noche. En conjunto, y sumado el fuego de la pasada noche, todos los desperfectos han costado cerca de 20.000 euros a las arcas municipales. «Es intolerable. Queremos que la Policía detenga a los autores y, por lo que al Ayuntamiento respecta, pasarles la factura de un comportamiento execrable. También habrá que empezar a plantearse cambios en el sistema de recogida de basuras para evitar este tipo de acciones», afirmó la regidora.