El Ayuntamiento de Langreo prevé abrir las piscinas al aire libre de Riaño a finales de este mes hasta el 8 de septiembre. Esta es la intención del ejecutivo municipal, que espera a conocer la normativa sanitaria regional para fijar fechas y condiciones de acceso.

El pasado año se tuvo que establecer un aforo limitado a menos de la mitad del actual debido a la crisis sanitaria. Además se cerró media hora por la tarde para efectuar una desinfección de las instalaciones, fijando turnos de mañana y tarde.

La concejalía de Deporte trabaja en la planificación de la temporada estival en las piscinas de Riaño, donde se organizarán campamentos acuáticos, y ha puesto en marcha el procedimiento para contratar el servicio de socorrismo, que está en plazo de presentación de ofertas. A este contrato se destinarán 12.500 euros.

Antes de abrir, el Consistorio tiene que acometer labores de reparación en las piscinas de Riaño. El aforo de las instalaciones establecido durante el pasado verano fue de 130 personas, por debajo de la mitad de la capacidad, que es de 300. Las piscinas abrían a las 12.30 horas y cerraban a las 20.00 horas. No se podía acceder al recinto desde las 16 a las 16.30 horas para abordar una desinfección “exhaustiva” del equipamiento. Era una de las dos que se realizaban durante la jornada en las instalaciones, tal y como fijaba la normativa sanitaria de la última temporada estival

La ducha de acceso a los vasos que se habilitó el pasado verano. | LNE

Hace un año se abordaron varios trabajos de mejora del equipamiento deportivo. Entre ellas figuró el vallado del recinto y la instalación de una ducha en el único acceso a las piscinas, de forma que todos los bañistas tuviesen que pasar por ella antes de entrar en los vasos. El pasado verano abrieron también las piscinas al aire libre de Laviana, mientras que las de Sobrescobio y Caso permanecieron cerradas.

El verano anterior, el de 2019, se inauguró una zona adicional de solarium. Las piscinas al aire libre de Riaño son gestionadas por el Ayuntamiento de Langreo. Las instalaciones permanecieron sin uso tres veranos después de que el Principado, anterior propietario, clausurase el complejo deportivo en el que se encuentran. Fue en octubre de 2010, cuando también cerró las piscinas de Pénjamo, quedando el concejo sin piscinas al aire libre de gestión pública. En 2014, el Consistorio las abrió tras llegar a un acuerdo con la Consejería de Cultura. Ambas administraciones pactarían después la cesión de la propiedad al Ayuntamiento, con una aportación regional de 600.000 euros para reparar las instalaciones, que incluyen junto a las piscinas, el polideportivo, un edificio de usos múltiples y pistas de tenis.

El complejo deportivo de Riaño fue rehabilitado por fases por el Consistorio. Las otras instalaciones cerradas, las de Pénjamo, permanecen sin uso desde octubre de 2010 y en avanzado estado de deterioro. Los vecinos han reclamado reiteradamente a las administraciones su recuperación.