El sector inmobiliario está en una difícil espiral en la comarca. El precio de venta de viviendas de segunda mano en el municipio cabecera, Mieres, ha caído en un 9 por ciento. Son los datos que aporta uno de los portales virtuales inmobiliarios más conocidos en España, “Idealista”. A pie de calle, representantes del sector en la comarca, afirman que la vivienda está “muy devaluada” y será “muy difícil” volver a la situación previa a la crisis sanitaria del covid-19.
Es crisis sobre crisis. Con la caída del sector inmobiliario en la conocida como “crisis del ladrillo” o “hipotecas basura” (año 2008), la burbuja inmobiliaria explotó con estruendo. Los precios de venta de viviendas de segunda mano cayeron sin remedio: en algunos casos, según las fuentes consultadas, “algunos propietarios rebajaron hasta un 30 por ciento el precio de las casas que estaban anunciando”. Aún así, era casi imposible encontrar un comprador para el “stock” disponible.
Tras una década de caída libre, el sector empezó a levantar cabeza. A principios de 2020, las noticias eran alentadoras: por primera vez desde la crisis “del ladrillo”, el sector cogió pulso. Responsables de asociaciones inmobiliarias en Asturias anunciaron que Mieres estaba entre los municipios en alcanzar el nivel de absorción de “stock” de la vivienda. Es decir, el número de personas interesadas en adquirir una casa o un piso se acercaba al número de viviendas disponibles. “Empezamos a ver algo de luz tras muchos años de oscuridad”, afirmaron entonces los responsables del sector.
La contenida alegría duró muy poco. En el mes de marzo, se anunció el confinamiento domiciliario en España por la crisis sanitaria del covid-19. Tres meses de “parón” total para el sector: “Fue un golpe muy duro, del que estamos intentando recuperarnos”, apuntaron aquel verano los representantes del sector. Y parecía que la recuperación sería rápida; muchas familias se interesaron en la zona rural de las Cuencas, por el temor de nuevas medidas de distanciamiento social. “Muchos preguntaron, hubo muchas visitas, más que en años, pero se formalizaron pocas transacciones”.
La sombra de la crisis del covid-19 es muy alargada. Las dificultades económicas que trajo la difícil situación sanitaria se hace notar en el mercado inmobiliario: “Muchas personas perdieron su trabajo. Otras, temen perderlo. Es por eso que comprar una vivienda no es ahora la prioridad para la mayoría de las familias”, explicaron desde el sector inmobiliario en la comarca del Caudal.
El precio de los pisos
Los precios, por lo tanto, caen. “Hay propietarios que no tienen prisa por vender sus viviendas. Otros, en cambio, sí la tienen y la mejor forma de aumentar el atractivo de sus anuncios es rebajar el precio final para llamar a los compradores”, señalaron. El precio, según el ya citado portal inmobiliario, ronda ahora los 620 euros por metros cuadrados. Es un 3,3 por ciento menos del valor medio en septiembre de este año. Un 9 por ciento menos que en el ejercicio anterior.
¿El sector ha tocado ya el fondo? Los responsables inmobiliarios consideran que no. “Será realmente difícil llegar a los niveles previos de la crisis del covid-19”, destacaron. Aunque hay una buena noticia: a su juicio, la recuperación será más rápida que en la anterior crisis, la que era originalmente del sector inmobiliario. Consideran que, en la mayoría de los casos, “es más el miedo a no poder hacer frente a una vivienda que la situación real de las familias”.
