El secretario general de la UGT, Pepe Álvarez, mostró ayer su satisfacción por los acuerdos desarrollados en los últimos meses con el Gobierno central, y aseguró que “estamos ganando derechos para los trabajadores de nuestro país”. En este sentido, el máximo mandatario ugetista se refirió a la modificación de las pensiones, a la reforma laboral y la extensión de los ERTES y la subida del salario mínimo. Álvarez indicó que “por primera vez en nuestra historia, toda la reforma que se ha llevado a cabo en el sistema de pensiones va a servir para mejorar estos subsidios y asegurar el futuro de nuestro sistema”.
De histórico calificó también el secretario general de la reforma laboral aprobada, de la que dijo permitirá que haya una reducción de la tasa de temporalidad. “Hemos logrado un acuerdo histórico en lo referente a las contrataciones, y habrá mucha menos temporalidad”, indicó Álvarez. Un hecho que achacó a que la reforma también “incluye la flexibilidad de los ERTES para abordar los problemas de las empresas de nuestro país”. “A partir de ahora no habrá que tirar de despidos, sino de los mecanismos que se van a poner en marcha”, valoró el líder sindical.
Sobre la subida del salario mínimo, Álvarez explicó que los mil euros mensuales “son un hito y fueron una exigencia que siempre hemos hecho desde aquí, desde el cementerio civil de Mieres”. Y de cara al futuro, dijo, “tenemos por delante los convenios colectivos, y los subir los salarios son un reto para nuestro sindicato en 2022”.
Por otra parte, y cuestionado por el cierre de las térmicas y de las minas, el líder de la UGT calificó el proceso de precipitado. Unas políticas que con la explosión de la guerra de Ucrania y la invasión por parte de Rusia, entiende que “habrá que revisar”, toda vez que se espera que los precios de determinadas fuentes de energía como el gas inicien una escalada de precios no se sabe hasta donde.
