Mieres tiene la fórmula del amor eterno: "Respeto, diálogo y quererse mucho"

Seis parejas del concejo celebran sus bodas de oro aprovechando la comida de San Valentín del Centro Social de Mayores

Por la izquierda, María José Huerta, Julio González, Rufino Díaz, Josefina Lario, Vicente Rodríguez,  Marcelino González, Julia María Velasco, María Ángeles Fernández, María Abel García,  José Luis Baizán, Simeón García y Valentina Rosa Roca . | D . O.

Por la izquierda, María José Huerta, Julio González, Rufino Díaz, Josefina Lario, Vicente Rodríguez, Marcelino González, Julia María Velasco, María Ángeles Fernández, María Abel García, José Luis Baizán, Simeón García y Valentina Rosa Roca . | D . O. / David Orihuela

David Orihuela

David Orihuela

Josefina Lario y Rufino Díaz se paran a la entrada del Centro Social de Personas Mayores de Mieres, observan un mural en el que aparece una foto suya actual y otra del día de su boda, el 10 de julio de 1971. Entre las dos imágenes ha pasado "toda una vida". "Es que soy muy sufrido, es la forma de llevarlo bien", bromea Rufino cuando se le pregunta por el secreto de llevar más de 50 años de matrimonio. "Cuando ella dice algo, yo le digo que sí", sigue la chanza. Josefina media en la conversación para explicar cuál es, en su opinión, el secreto del amor eterno, porque no hay duda de que 50 años de matrimonio es una eternidad. "El secreto es el respeto y la confianza, y luego quererse, claro", explica la mujer.

Josefina Lario  y Rufino Díaz. | D. O.

Josefina Lario y Rufino Díaz. | D. O. / David Orihuela

Josefina y Rufino forman una de las seis parejas que ayer celebraron sus bodas de oro en el Centro Social de Personas Mayores de Mieres. Era un día muy especial para Lario y Díaz, pero también para María José Huerta y Julio González; Vicente Rodríguez y Julia María Velasco; Marcelino González y María Ángeles Fernández; María Abel García y José Luis Baizán, y para Simeón García y Valentina Rosa Roca.

Todos llevan más de 50 años casados y ayer se sumaron a la comida de San Valentín. Hubo mesa y mantel para 109 personas,

Josefina y Rufino recuerdan que cuando empezaron la vida en común no tenían apenas nada. Tenían un casa, pero era poco más que un techo, porque estaba vacía. El viaje de novios fue "a Barcelona, a casa de unos tíos", explica ella. Y allí, a cientos de kilómetros de casa, comenzaron a construir un hogar. "En una mueblería vi una habitación que me gustó mucho, así que cuando volvimos a Mieres la hice igual", explica Rufino, carpintero de profesión, que con sus propias manos construyó ese hogar, "la habitación, luego la cocina, el baño...todo". Josefina era ama de casa hasta que cogió "un puesto en la plaza donde vendía LA NUEVA ESPAÑA; era la que más periódicos vendía de Mieres y estuve allí 20 años, hasta que lo dejé para cuidar a mi madre", detalla la mujer.

De Salamanca llegó a Mieres Simeón García. Trabajó en la construcción y de frutero hasta jubilarse en la mina. Ayer celebraba sus 50 años de matrimonio con Julia María Velasco. Ella lo tenía muy claro: para estar tanto tiempo al lado de una persona, "hay que hablar mucho, compartirlo todo y quererse mucho".

A ellos les ha funcionado. Así que paciencia, confianza, amor, respeto, diálogo y quererse mucho. Así, irán pasando los años llenos de felicidad.

Suscríbete para seguir leyendo