El refugio de Brañagallones abrirá durante el verano tras afrontar obras urgentes de mejora

No es lo deseado pero al menos es algo. El refugio de Brañagallones, en el Parque Natural de Redes, en el concejo de Caso, abrirá próximamente sus instalaciones para que los amantes de la montaña las puedan utilizar durante los meses de verano. La intención es que el refugio de montaña permanezca abierto al menos los meses de junio, julio y agosto. Tal vez las instalaciones no estén al cien por cien durante esos meses pero sí podrán estar abiertas al público. Para ello, la Federación de Montaña del Principado de Asturias, encargada de la gestión del refugio, está realizando estos días obras de mejora. Se trabaja principalmente en la puesta a punto de los sistemas de calefacción y agua caliente, uno de los grandes problemas del refugio. El actual sistema eléctrico, con dos generadores de gasoil, ha provocado en los últimos años constantes problemas de suministro, e incluso apagones, al encontrarse obsoletos.

Brañagallones debería estar abierto desde Semana Santa, a finales de marzo, pero las deficiencias en el edificio han retrasado su apertura hasta junio.

Luz verde al arreglo del refugio de montaña de Brañagallones, en Caso

Todo esto, a la espera de la ansiada y anunciada obra de reforma del equipamiento, que tendrá un presupuesto de 700.000 euros, según anunció recientemente la consejera de Cultura, Política Lingüística y Deporte, Vanessa Gutiérrez. Hasta ahora solo había trascendido la existencia de una partida de 300.000 euros de fondos europeos para mejorar la eficiencia energética.

El tejado del edificio está en muy malas condiciones y todo el complejo se alimenta de esos dos viejos generadores de gasoil que, además de gastar mucho, se estropean con frecuencia. Para solventar todas las deficiencias están proyectadas unas obras que suponen una reparación integral del tejado, impermeabilización y estructura soporte (rastreles), así como la mejora de ventilaciones, chimeneas y la instalación de ventanas oscilobatientes tipo "velux". Uno de los objetivos del Principado, para lo que se cuenta con financiación europea, es que el refugio sea "verde", que funcione con energías renovables: "Brañagallones debe ser un ejemplo de sostenibilidad", subrayó la consejera de Cultura y Deportes en una reciente comparecencia en la Junta General del Principado.

La gran obra, tras el verano

La previsión es que esos trabajos comiencen tras la temporada de verano, el próximo mes de octubre, y que se prolonguen durante todo el invierno. La fecha de finalización es incierta ya que la marcha de la obra dependerá en gran medida de las condiciones meteorológicas.

El refugio de Brañagallones fue construido en los años sesenta y se encuentra a una altitud de 1.215 metros de altitud. Inicialmente, fue un refugio de cazadores, y posteriormente se convirtió en un hotel de lujo. Desde el año 2016, este edificio propiedad de la Administración Autonómica del Principado de Asturias, está gestionado por la Federación de Montaña de Asturias (FEMPA), a través de un convenio firmado entre la propia Federación y la Dirección General de Deportes del Principado de Asturias. La Federación ejecuta estos días trabajos para poder abrir en verano.

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