Hay quien vive en Madrid y quiere pasar sus vacaciones en un lugar húmedo, con verdes prados y bosques que rodean su casa de campo, pero que a su vez no son molestados por inquilinos situados en la proximidad.
Hace años, unos cuantos, conocí a bastantes personajes importantes y políticos veraneando en Asturias. Alguno por su ascendencia y otros por casamiento, cómo podía ser Camilo Alonso Vega, casado con una noreñense de familia fabricantes de embutidos.
Al igual que el expresidente Calvo Sotelo gozaba de la costa asturiano en sus vacaciones, cuñado del exministro Morán de reciente fallecimiento. Sin olvidar a Rodrigo Rato, que observando su ascendencia, dirigía un grupo de empresas de diversa índole. Y así un montón de conocidas personas que ahora olvido para no extenderme más.
Más este verano se presentó uno nuevo, Vicepresidente del Gobierno, con su esposa, ministra de igualdad, con sus tres hijos en Asturias, en el pueblo de Felgueras, Pola de Leña, de donde salió quizá más rápido que entró. La mala impresión no sé quién la causó, si él o los lugareños, a pesar de que sus numerosas escoltas procuraron poner cierta paz y orden entre todos ellos. Hasta en la carretera le hicieron una colorida pintada de muy mal gusto.
Así que todo ello obligó el retorno de la familia política a Madrid, como diríamos vulgarmente "a carajo sacao", y probablente sin muchas ganas de volver a Asturias: ¡Hay, padre, que pena me da!
