Avilés, A. FERNÁNDEZ

El Navarro suma ya seis victorias consecutivas, la mejor racha de los equipos de Tercera, y se convierte en la revelación del segundo tercio de la Liga. Sólo el Tuilla resistía a los de Valliniello, pero la derrota en el derbi local del Ganzábal ante el Langreo le deja rezagado.

La buena racha azulgrana empezó cuando el equipo estaba en su peor momento, era último y acababa de perder 4-1 con el Praviano tras un flojo partido, una derrota que escoció en el vestuario de Tabiella. A partir de ahí todo fueron victorias: Ribadesella, Nalón, Avilés, Lealtad, Condal y Cudillero. El equipo se ve fuerte y ya piensa en sumar la séptima el sábado (15.45 horas) ante el Llanes en Tabiella.

El inicio fue muy difícil. El Navarro perdió en el verano a hombres importantes como San Eloy, Abraham y Valero, y su rendimiento era una incógnita, máxime cuando el calendario no era nada favorable y las lesiones mermaban su potencial; pero todo eso pasó. «Siempre dije que cuando recuperáramos efectivos mejoraríamos, y así fue», señaló el técnico, Juanjo Duque.

Y es que cuando las cosas van bien, todo sale bien. Duque no tenía ante el Cudillero en La Roja a cuatro hombres de muchos minutos: Logan, Marcos, Morán y Rubo, y viajó con 14 (Morán se vistió lesionado), pero los jóvenes que entraron cumplieron a la perfección y Cayarga hizo un gran gol para abrir el marcador. Luis Enrique lo cerró.

El equipo se acerca a puestos de liguilla, pero dentro se mantiene la calma. «Sólo pensamos en la permanencia. Estamos consiguiendo un colchón importante con el descenso y eso es bueno, pero sabemos que esto va por rachas. Conocíamos la mala y ahora toca la buena. Eso es todo», insistió Duque.

La preocupación máxima es recuperar lesionados, y es probable que ante el Llanes sólo puedan estar Logan (que faltó por trabajo) y Marcos, que evoluciona bien.