Arenas (Cabrales),

Lucas BLANCO

Las ovaciones se sucedieron durante la jornada de ayer en la meta instalada en Arenas de Cabrales para recibir como héroes a cada uno de los alrededor de 200 atletas que no dudaron en tirarse al monte para recorrer los 74 kilómetros (más de 13 con un desnivel pronunciado) que constituían el circuito de la VIII Travesera Integral de los Picos de Europa, en la que resultó ganador el atleta vasco Txus Romón, que calificó la prueba como «la más dura del mundo» tras parar el crono en 12 horas y tres minutos, batiendo el récord de la competición.

Los atletas coincidían en señalar que la de ayer fue la edición con mayor nivel de participantes, lo cual quedó reflejado en el arranque de la carrera en la que el campeón de 2010, el cántabro Francisco Gutiérrez, y Txus Romón se escaparon como una exhalación desde los primeros kilómetros, pero una tendinitis obligó al primero a retirarse a mitad de carrera.

A partir de ahí, Romón tuvo que hacer la guerra por su cuenta a la vez que emergía la figura de Salva Calvo, corredor leonés ganador de la edición de 2009, que a pesar de llegar a tener una desventaja en torno a los 30 minutos, logró recortar en más de un cuarto de hora esa diferencia, aunque al final llegó a 23 minutos del vasco.

Al llegar a meta, Calvo, de 49 años, se mostró su satisfacción por el segundo puesto. «No pensaba competir, el nivel era altísimo y venía de hacer otras tres pruebas en un mes», señaló el atleta leonés aparentemente fresco, que además destacó el nivel de la competición. «He corrido carreras en todo el mundo y ésta es la más dura», señaló.

Poco antes, el ganador, había llegado a meta más mermado ante el temor a perder la victoria en los últimos metros. «Sabía que Calvo me pisaba los talones y eché el resto porque veía la carrera perdida», explicó el corredor de 35 años que, por otra parte, quiso poner en valor el significado de la Travesera. «No hay duda que, con estos desniveles, es la prueba más dura del planeta y es un orgullo poder ganarla», comentó fatigado.

Completó el cuadro de honor el también vasco Imanol Alesón con un tiempo de 12 horas y 57 minutos, quedando como mejor asturiano el cangués David de la Cuesta del club Peñasanta que fue cuarto al parar el crono en trece horas, mientras que el sierense Juan Fuego fue quinto, llegando hora y cuarto más tarde que el ganador.