Jugador del Oviedo

Oviedo, Nacho AZPARREN

-Pacheta le definió como el «jugador más importante».

-Aquí tomos somos importantes. La defensa consiguió que no nos hicieran gol, los medios nos surten de balones? sería injusto destacar sólo a uno.

[Xavi Moré (Barcelona, 1982) responde a los cumplidos con un tópico, con una de esas frases que los futbolistas usan para no romper los códigos del vestuario. Tras el partido contra el Marino, Pacheta señaló al extremo como clave en la mejoría. El momento que atraviesa está llevando al equipo a una reacción necesaria si quiere aspirar al ascenso. Moré acude a la cita acompañado de su perro «Piko», un pomerania de seis años tranquilo y mimoso que tiene desde su etapa en Castellón.]

-¿Le sorprendieron las declaraciones del entrenador?

-Sí, porque no suele individualizar. Se agradece. En privado sólo me pide que siga igual, es más expresivo con la prensa.

-Las victorias parecen cambiar la cara al equipo.

-Es cierto, no había más que ver el entrenamiento del lunes. La gente bromeando, nada que ver con lo que ocurrió después de La Roda. Estamos a cinco puntos de la liguilla, en algunas jornadas podemos estar metidos en la pomada.

-Y eso que la cosa no ha funcionado del todo desde el principio.

-El estilo de Pacheta es mantener la portería a cero. Cuando falla el primer pilar, la cosa no funciona. A partir de la seguridad defensiva podemos crecer. Hasta ahora hemos creado ocasiones, pero nos ha faltado cerrar los partidos.

-Desde pretemporada se le ve muy fino.

-En verano comencé bien, pensaba que si todo seguía su cauce podía tener un buen inicio de campaña, pero tampoco esperaba un rendimiento así en las siete primeras jornadas.

-Es un hombre de rachas.

-Ahora espero ser un hombre constante. Mi reto es conseguir treinta partidos al mismo nivel.

-Michael Laudrup decía que prefería dar una asistencia antes que marcar un gol. ¿Le ocurre lo mismo?

-En mi posición la misión número uno es dar goles, pero no haré ascos a marcar. Siempre hago seis, siete goles, el año pasado cinco? Es otro reto personal: aportar más en el apartado goleador.

-¿Sigue pensado que el equipo va a estar arriba?

-Sí, fijo. No sé qué me apostaría, pero estaremos entre los 4 primeros. Si no lo estamos es para echarnos a todos.

-Entre todos los halagos que ha recibido, ¿cuál ha sido el que más le ha gustado?

-El otro día vi un blog que se llama «Ovieditis» y me gustó mucho un artículo sobre mí. Decía muchas verdades y eso que no conozco a la persona que lo escribió. Parecía que lo había hecho yo.

-¿Y entre sus compañeros?

-Tengo suficiente con aguantar a Manu Busto todos los días (risas). Se sienta al lado en el vestuario desde hace tres años y pase lo que pase siempre me dice: «vaya crecido que estás». Pero como lo conozco intento no hacerle caso?

-¿Su padre ve los partidos del Oviedo?

-Este año no porque no los televisan. Se informa por lo que le cuento y los resúmenes. Lo pasa mal porque lo vive intensamente. El año pasado a veces era mi madre la que veía los partidos y luego se los contaba a él.

-¿Le mete caña?

-No. La caña que me metía entrenando la compensa ahora.

-¿Fue complicado convivir en un vestuario con su padre?

-Es difícil de llevar. Se puede compartir un tiempo pero al final tienes que separarte. En las categorías inferiores era complicado, para muchos yo era «el hijo de Moré». Siempre hay polémica. Lo llevé bien pero no me gustaría volver a vivirlo.

-¿Si en el futuro el Oviedo se propusiera fichar a su padre como entrenador?

-Me alegraría en principio porque le quisiera un gran equipo como el Oviedo, pero luego me plantearía qué haría.

-Se le ve integrado en Oviedo.

-Integradísimo. Mi mujer y yo estamos encantados.

-¿Conocía Oviedo antes de venir a jugar?

-No lo conocía de nada, pero se parece mucho a Valladolid. El verano que fiché llamé a Jorge Rodríguez. Me habló maravillas de la ciudad y el club.

-¿Cuánto le queda de fútbol a Xavi Moré?

-Al máximo nivel me quedarán tres o cuatro años. Luego veremos qué haré. Luego seguiré jugando aquí o en otro lugar. Hay casos como los de Mario Prieto o Sergio Villanueva que aguantan más tiempo porque se han cuidado.

-¿Y después del fútbol?

-No lo sé. Estoy sacando los títulos de entrenador, pero no termino de verme en un banquillo. Tengo la carrera de INEF y me gustaría hacer un máster de gestión en entidades deportivas. Me gustaría dedicarme a este aspecto.

-El futuro inmediato le lleva a Madrid. Volver a la capital suele ser sinónimo de gol suyo.

-Ojalá siga así. Antes del partido ante el Atlético B dio suerte el reportaje que hicimos, ¡que siga la racha!