Marco Díaz, entrenador del Sporting, recibía felicitaciones y el técnico comentaba que «el triunfo es de los chavales porque trabajaron muy bien todo el año. Llevamos muy buenos números como equipo y como goleadores y pocos encajados con Álex y Chechu. En este partido pesaban un poco los nervios o el ambiente. Noté al equipo como algo agarrotado. Pero enfrente teníamos a todo un Celta. También quiero agradecer los últimos cambios en la metodología de trabajo en la secretaría que nos ayudó».

Mientras que la emoción invadía al goleador Álex García, de 17 años, de Piedras Blancas, porque «le quiero dar ánimos a mi primo Jonathan que está ingresado en el hospital para que se recupere pronto». Lo que tiene claro es que «tenemos un equipazo y vamos a luchar por ganar la Liga de Campeones y la Copa. A ver si tenemos suerte».