Tres golean juntos

Con un tridente como el formado por Cristiano Ronaldo, Higuaín y Benzema resulta más fácil batir récords como el que el Madrid igualó el sábado frente al Sporting. De los ciento siete goles del equipo de Mourinho en la Liga, ochenta son de estos tres delanteros empeñados en hacer historia. A falta de cinco jornadas, el trío blanco ya ha dejado atrás la marca establecida en la temporada 2008-2009 por Messi, Eto'o y Henry con el Barcelona, de setenta y dos. La pólvora de los delanteros madridistas no se limita a la Liga, ya que entre todas las competiciones también suman ciento siete. Los barcelonistas cerraron la temporada del triplete con un número redondo: cien.

Mientras que Cristiano Ronaldo va camino de batir su récord personal e Higuaín se acerca al suyo (21 por los 27 de la Liga 2009-2010), el salto cualitativo del Madrid tiene mucho que ver con Benzema. El francés no había respondido a las expectativas de su fichaje en las dos primeras temporadas: ocho en la primera y quince en la pasada. Ahora, con cinco jornadas todavía por delante, ya ha cantado dieciocho, muy cerca de su mejor marca en el campeonato francés: veinte en su penúltima temporada en el Olympique de Lyon. Entre todas las competiciones, Benzema es el segundo máximo realizador del equipo, con veintinueve.

Como el actual con Cristiano, el Madrid de Toshack también tenía un «matador» principal, el mexicano Hugo Sánchez, que se proclamó «Pichichi» con treinta y ocho goles. Pero el segundo máximo realizador madridista en aquella Liga 1989-1990 fue un centrocampista, Martín Vázquez, que anotó catorce, mientras que el líder de aquella generación, Butragueño, se quedó en diez. A partir de ahí, los que más contribuyeron al récord que ahora está a punto de pasar a la historia fueron Losada (ocho), Míchel (ocho) y Fernando Hierro (siete). Ahora, por debajo del podio hay que ir hasta los cinco goles marcados por Di María, Kaká y Callejón.

Ni siquiera el Madrid de las cinco Copas de Europa consecutivas contó con un trío tan productivo como el de este momento. Y eso que en alguna de ellas se juntaron dos leyendas del fútbol mundial como Puskas y Di Stéfano. Lo más cerca que se quedaron de los números actuales fue en la temporada 1959-1960, cuando a los 49 goles de Puskas y los 24 de Di Stéfano se unieron los 22 de Pepillo para llegar a 95. Lejos de los 107 de esta campaña, a la que aún le quedan cinco partidos de Liga y al menos dos de la Liga de Campeones.

Los números del tridente también han sido posibles por las variantes tácticas introducidas por Mourinho. A diferencia de la pasada temporada, en la que Higuaín estuvo de baja cuatro meses por una lesión de hernia discal, ahora el técnico junta en muchas ocasiones a sus tres artilleros. Pese a que eso supone que Higuaín y Benzema tengan que escorar la posición, su pegada no se resiente. Han demostrado su compatibilidad, aunque en los partidos más comprometidos, como los que se avecinan, Mourinho ha preferido al francés.